El gobernador Miguel Lifschitz firmó este lunes en la ciudad de Santa Fe un acuerdo con representantes del Movimiento Los Sin Techo para poner en marcha la construcción de 200 nuevas viviendas, de las cuales 160 se levantarán en el barrio Jesuitas y las 40 restantes en el barrio Santo Domingo de la capital provincial.
El secretario de Estado del Hábitat, Diego Leone, destacó el hecho de poder trabajar en conjunto con una institución como Los Sin Techo “que tiene mucha experiencia en la ciudad y mucho conocimiento” y remarcó la importancia de “no sólo efectuar relevamientos y diagnósticos en materia habitacional, sino brindar soluciones concretas”.
“Creemos que donde hay un rancho tiene que haber una casa construida de material, que sea habitable y tenga los servicios elementales. Esto es lo que pudimos lograr trabajando en conjunto durante estos tres años y medio”, añadió.
“Las casas se van a construir en el barrio Santo Domingo, donde ya hay 33 viviendas construidas y habitadas sobre un terreno que la provincia había adquirido hace dos años; y en barrio Jesuita, que es un proyecto mucho más amplio y ambicioso. Se trata de soluciones habitacionales que se construyen rápidamente, porque son viviendas premoldeadas”, explicó Leone. Y aseguró: “Vamos a seguir trabajando para cumplir con todos los compromisos asumidos”.
Por su parte, el coordinador de Los Sin Techo, José Luis Ambrosino, aseguró que lo firmado este lunes, “para el movimiento es una profundización de la política de erradicación de ranchos”.
“No hay ninguna persona que no viva en un rancho de chapa que no sea indigente –remarcó Ambrosino–. Así que el primer paso para golpear a la indigencia es sacarlo de esa cueva de chapa y llegar a una casita digna”.
En cuanto a la relación con el gobierno provincial, el militante reconoció “todo lo que ha hecho en esta administración”, y recordó que antes, “gestionar una casita para un pobre era ir al Ministerio de Desarrollo Social y competir con el que pedía un sillón de ruedas, un techo, una escuela”.
“Nosotros hoy estamos incorporados a la política de vivienda de la provincia. Para nosotros es fundamental y tenemos que agradecer al poder político de Santa Fe que a pesar de estar en un momento de transición, la preocupación por los pobres y los indigentes sigue siendo tan profunda como en el momento de plenitud del gobierno”, agregó.
“Nuestra gente tenía miedo de que la abandonen. No solo que no nos abandonan sino que estamos ratificando esta política de Estado. A los que van a venir, que ya los conocemos, les decimos que tienen que ratificar esta política. Es la única solución para combatir la indigencia y la pobreza”, concluyó Ambrosino.
Techo y esperanza
El Movimiento Los Sin Techo surgió en 1987 de la mano del sacerdote Atilio Rosso. Ese año fue declarado por las Naciones Unidas como el “Año Internacional de la Vivienda para las Personas sin Hogar” y es a partir de este momento que desde la organización se diseñó una estrategia para avanzar en el derecho a la vivienda, el desarrollo del hábitat y la organización comunitaria de los sectores vulnerables. Rosso, quien falleció en 2010 a los 87 años, continúa siendo el líder espiritual del Movimiento.
«Construyen con su esfuerzo»
El sistema para el levantamiento de las casas de Los Sin Techo es de autoconstrucción. “Nosotros hacemos las mediciones, la provincia nos da los fondos y a través de la gente hacemos la autoconstrucción. Esto genera una acción positiva porque no se les da, sino que construyen con su esfuerzo”, destacó Ambrosino.
Las 200 viviendas se levantarán en los barrios Jesuitas y Santo Domingo, donde la provincia y el movimiento ya avanzan con proyectos de urbanización integral. Se trata de unidades habitacionales que se ensamblan con paneles de hormigón prefabricado y se montan sobre una platea previamente realizada. Se caracterizan por un diseño universal, flexible y que contempla la posibilidad de futuras ampliaciones.
En el barrio Jesuitas, el gobierno provincial financia actualmente obras de infraestructura por más de 100 millones de pesos. La urbanización del lugar permitirá construir las 160 viviendas contempladas en el convenio.
En tanto, en Santo Domingo, ya se lleva adelante un trabajo en conjunto para urbanizar y construir 88 viviendas sobre un terreno que el gobierno de Santa Fe adquirió mediante una expropiación de más de 4 millones de pesos. Dicha intervención representa un esfuerzo conjunto ya que la provincia financia las obras y la organización social coordina los trabajos con las familias beneficiarias que aportan la mano de obra para construir sus propias casas. Hasta ahora llevan concluidas 33 viviendas, destacó la provincia.
Además, se realizan obras de infraestructura para dotar de servicios al barrio e integrarlo a la trama urbana: ejecución de red de energía eléctrica, agua potable y desagües pluviales, y apertura de nuevas calles con mejorado y cordón cuneta.