El pasado 25 de agosto se cumplieron 200 años de la emisión del primer papel moneda en el interior del país. Fue en Santa Fe promulgado por el gobernador Brigadier General D. Estanislao López, justo en medio del debate por los proyectos de dolarización y la consiguiente pérdida de soberanía que conlleva no tener moneda propia.
En el marco de las XLIII Jornadas Nacionales de Numismática y Medallística llevadas a cabo en la ciudad de Santiago del Estero los días sábado 19 y domingo 20 de agosto, el presidente del Centro Numismático de Santa Fe Bernardo Boaglio, dio una charla contando detalles de aquel momento histórico.
Boaglio en diálogo con Cadena 3 contó que la emisión del papel moneda la realizó el por entonces gobernador de la provincia Brigadier López por una necesidad monetaria. «En la provincia no había circulante metálico, sobre todo para hacer grandes transacciones, es por ello que tuvo hacer un giro de tres denominaciones de papel moneda: billetes de un peso que equivalía a 8 reales (hasta esa época era la unidad monetaria española), dos pesos más un real equivalente a 17 reales y cuatro pesos y dos reales. El equivalente a los billetes de pesos eran a monedas de oro y del real a la moneda de plata.
El primer papel moneda se emitió en el banco de Buenos Aires en 1822, época donde explica Boaglio había guerras civiles y había separación entre las provincias. «No era la república que conocemos hoy», señaló.
El papel moneda emitido en Santa Fe en 1823 era un papel escrito de puño y letra y de circulación interna en la provincia. «El billete decía lo que valía para ser utilizado en el territorio de Santa Fe, firmados por López y el secretario Seguí. Tenían un sello blanco sobre el papel de la diosa de la Victoria».
El billete de un peso tenía el sello en el medio, dicho billete es el único que fue descubierto y que hay registros. El de dos pesos tenía dos sellos, uno en cada costado y el de 4 pesos tenía el sello en cada uno de los extremos.
Los billetes se emitieron por el periodo de un año y luego fueron retirados de circulación. No tuvieron mucha aceptación. «No eran utilizados para transacciones cotidianas, sino más elevadas», aclara el Presidente del Centro Numismático de Santa Fe.
El circulante que se utilizaba por aquel entonces eran las monedas y medio real y de un real.
«Seguimos en la investigación de ver para qué fue creado, López menciona que lo emiten para solucionar problemas de contratos y demás, de todos modos tenemos que ser más específicos en la búsqueda en archivo histórico y conocer si hay alguna explicación más puntual del por qué», indicó Boaglio.
El único buscador es el Archivo Histórico Provincial. «Es revisar actas y actas grandes», explicó. «De estos billetes se emitieron 3 mil: 2 mil de uno y 500 de cada una de las otras denominaciones, cuando se retiran de circulación se retiran 2955, quedan sin retirarse 5 billetes, dos de ellos están en el archivo histórico», relató.
Más avanzados en la mitad de siglo empiezan a emitir billetes los bancos privados. «Hay un boom cuando Urquiza es presidente de la República y surgen muchos bancos en Entre Ríos. A fines de 1800 se crea la caja de reconversión que es la que utiliza Roca para hacer la unificación de la moneda nacional. Hasta ese momento las distintas provincias que imprimían billetes», concluye Boaglio.
El Papel Moneda en Santa Fe
El gobernador de la Provincia de Santa Fe, Brigadier General D. Estanislao López, decretó el 25 de agosto de 1823 el giro de papel moneda con el fin de facilitar los cambios y todo género de contratos en beneficio común del Estado.
En el Art. 1º “Se establece que será por el término de un año contado desde la fecha, el giro de papel moneda en cantidad de cinco mil ciento ochenta y siete pesos, cuatro reales (5.187 pesos, 4 reales), comprendidos en tres mil billetes: dos mil de a peso, quinientos de a dos pesos un real y quinientos de cuatro pesos dos reales, los que serán amortizados en Cajas, cumplido aquél”.
En el Art. 2º señala que: «…serán numerados, escritos por una mano, sellados con el sello en blanco de la Diosa de la Victoria,… y rubricados por el Gobernador y Secretario”.
El 16 de diciembre de 1823, se ordena el retiro de la circulación de los billetes al haberse suspendido la circulación del papel moneda por los inconvenientes que presentaba. El Ministerio de Hacienda extrae los billetes que componían la suma total que se dio al público, la que queda amortizada.