Durante el primer semestre del año, según datos oficiales, la economía santafesina mostró índices favorables. Pero el impacto de las corridas cambiarias de julio y agosto y la estampida inflacionaria le pondrán fin a esa tendencia. Según el secretario de Finanzas del gobierno provincial, Pablo Olivares, “no puede descartarse” que la economía santafesina ingrese en una fase recesiva.
El último informe del Indicador Sintético de la Actividad Económica (Isae) de la provincia, publicado el jueves 13 por el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec), establece que en junio la economía creció un 0,4% respecto de mayo. El Isae registró una variación positiva interanual del 0,6% en junio, mientras que en el primer semestre de 2018 acumuló un incremento del 1%.
“El informe muestra la evolución de la economía hasta junio”, explicó Olivares en diálogo con El Ciudadano. “Este instrumento toma registros de lo que pasó; no tenemos procesados los datos de los meses siguientes, pero el Ipec no hace proyecciones, sino que va registrando los datos hacia atrás. Obviamente hay datos adicionales, pero muy atomizados; no tenemos elementos para proyectar cómo va a evolucionar la actividad económica”.
Aunque el funcionario prefirió no anticiparse, es un hecho que el mes de junio será una bisagra y que, a partir de los datos correspondientes a julio, se encenderán las alarmas respecto a la evolución de la economía santafesina. Así lo muestran los indicadores de la industria (cayó 5,7% interanual en julio, según el Indec) y del comercio (retrocedió 5,8% interanual en el mismo mes, según datos de Came).
Las medidas macroeconómicas adoptadas desde el gobierno nacional no ayudarán a revertir la tendencia, sino que la profundizarán. Con una tasa de interés del 60%, un índice de inflación que duplicará o triplicará la meta prevista en el presupuesto 2018 y el dólar por encima de los 40 pesos, se avecinan nubarrones oscuros para la economía del país y de la región.
Junio fue el último mes en el que se pueden observar índices positivos. Ese mes, cinco de las seis series que componen el Isae presentaron una variación interanual positiva. La excepción fue patentamientos y transferencias de autos, que disminuyó 3,4% respecto del mismo período del año anterior.
El consumo de Agrogasoil presentó un incremento de 10,1% respecto del mismo mes del año anterior, mientras que el consumo de Energía aumentó 1,5% y Gas 1,3%. Siguieron la recaudación real de Ingresos Brutos y Empleo, con incrementos de 1,2% y 0,6% respectivamente.
En cuanto al comportamiento de las series respecto del mes anterior se observa un crecimiento en la serie de Agrogasoil (21,9%). También registraron variaciones positivas el consumo de Gas (14,7%) y la recaudación real de Ingresos Brutos (1,9%), mientras que Empleo se mantuvo estable (0,0%). Presentaron variaciones negativas el consumo de Energía (-0,1%) y Patentamientos y transferencias de autos (-5,3%).
“La recaudación se mantuvo debajo de la inflación; ese es un dato concreto”, remarcó Olivares. “Eso se explica por el esfuerzo que hace la provincia en el marco del Consenso Fiscal. El presupuesto se formuló con las tasas (de inflación) que había previsto el gobierno nacional el año pasado y lo que sucedió es que la inflación resultó mucho más alta. Es decir: se recauda más de lo previsto porque las proyecciones estaban hechas con una inflación anual por debajo del 20%. Hoy se recauda más porque la inflación es más alta, pero se recauda menos de lo que interanualmente creció la inflación”, explicó.
Si bien los primeros indicadores de la caída de la economía, a nivel nacional, ya se podían observar a partir de abril, en Santa Fe se logró mantener una tendencia alcista hasta junio. “No hay que olvidar que las series que mide el Ipec (empleo, energía, agro gasoil, gas, ingresos brutos y venta de autos) son bastante duras, no son volátiles”, indicó el secretario de Finanzas de la provincia. “El impacto suele verse con unos meses de rezago. Cuando uno analiza la evolución de la economía, las variables de causa y efecto siempre están mediadas por un par de meses. Por eso van a ser muy importantes los datos de julio y agosto porque nos van a empezar a marcar si realmente estamos ante un cambio de tendencia”.
