Con la visita del ministro de Economía a la presidencia de la Cámara de Diputados, el gobierno intentará apurar los tiempos de la reforma tributaria –que ya tiene media sanción del Senado– en busca de recomponer los ingresos propios y avanzar hacia un esquema de mayor autonomía fiscal.
Ángel Sciara estará mañana a la mañana en la Cámara baja, donde se entrevistará con diputados de todos los bloques por expreso pedido del PJ. Será la antesala del debate que se dará en las comisiones sobre la iniciativa mediante la cual el gobernador Antonio Bonfatti pretende aumentar el impuesto Inmobiliario y gravar con Ingresos Brutos a las empresas constructoras.
El titular de la Cámara de Diputados, Luis Rubeo, había vaticinado que el debate llevaría todo el mes de agosto. Y desde distintos sectores internos del PJ, partido que tiene mayoría en la cámara, ya anticiparon que introducirán cambios en el proyecto, por lo cual –una vez votado– volverá al Senado. Esas demoras, según Sciara, dificultarán al Ejecutivo la posibilidad de lograr nuevos recursos en lo que resta del año.
En paralelo, el gobierno intentará apurar el tratamiento legislativo de otro proyecto clave: la autorización para tomar deuda por 500 millones de dólares para obras de infraestructura. Esa iniciativa, que ingresó por el Senado, apunta a la obtención de recursos que le permitan a la provincia avanzar en proyectos a largo plazo: rutas, acueductos y hospitales, entre otros.
¿Reforma con cambios?
A excepción de los diputados del sub bloque 100% Santafesino, que responden a Oscar “Cachi” Martínez y que ya anunciaron que no votarán la reforma tributaria –a la que consideran un mero “impuestazo”–, el resto de los espacios internos del PJ mostraron voluntad de tratar el proyecto, pero a la vez anticiparon que intentarán incluir cambios en el texto que recibieron del Senado.
Sobre la reforma tributaria, el diputado del Movimiento Evita Gerardo Rico sostuvo ayer: “Nuestra idea es que sea lo más inclusiva y participativa posible para cambiar lo que fue la matriz económica, en materia tributaria, en los últimos 50 años de la provincia de Santa Fe”.
Pero, más allá de la postura del Movimiento Evita, los distintos sub bloques del PJ acordaron un cuestionario de cinco puntos para que Sciara responda en su visita a la cámara. El primero tiene que ver con el desendeudamiento, al tratamiento de la deuda flotante y a la recomposición de los saldos disponibles del Fuco, cuyos recursos el gobierno destinó a gastos corrientes.
El segundo punto está relacionado con la deuda pública. En el tercer ítem del cuestionario, los legisladores preguntan a qué se destinarán los recursos que surjan del aumento de impuestos. El cuarto punto es sobre los gastos públicos, el plan de contención anunciado por el Ejecutivo en abril, el avance de la obra pública y la cancelación de deudas con proveedores y contratistas. El último es sobre los cargos: los legisladores de la oposición quieren precisiones sobre la evolución de la planta de personal y la masa salarial desde 2007 a la fecha.
“Un nuevo cuento”
En cuanto al proyecto de endeudamiento remitido la semana pasada al Senado, el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria Darío Mascioli fue muy crítico: “Estamos seguros que ese endeudamiento es un nuevo cuento”, sostuvo ayer. “Quieren reflotar proyectos, maquetas y licitaciones que nunca concretan”, añadió retomando las viejas críticas del PJ al Frente Progresista.
“Nos preocupa este endeudamiento por 500 millones de dólares que se quiere contraer porque es una incógnita y no sabemos hacia dónde apunta”, disparó Mascioli. “Coincidimos en dos cuestiones. Una refiere a que la provincia no ha hecho obra pública y necesita fondos para hacerla y la segunda es que gastaron toda la plata en gastos corrientes y, por eso, el presupuesto 2012 votado en la Legislatura no les alcanza. El presupuesto, por otra parte, no se aplicó en obra pública”.
