“Todos los buenos jugadores pueden actuar juntos”. Lucas Bernardi volvió a utilizar esta frase para abordar la posibilidad de que Ignacio Scocco y Lucas Boyé compartan el ataque leproso frente a Lanús el próximo sábado en el Parque de la Independencia.
Hasta el momento no han podido coincidir: cuando llegó Boyé al Parque de la Independencia, Scocco estaba lesionado. Y cuando Nacho se recuperó de la ruptura fibrilar que sufrió ante Defensa y Justicia, el ex River debió purgar una fecha de suspensión ante Chicago por haber sido expulsado ante Huracán.
La previa ante Lanús se presenta entonces como la primera vez en la que Bernardi puede contar con ambos delanteros. Y la gran incógnita radica en si el entrenador considera ponerlos juntos desde el arranque y, en ese caso, cuál será la estrategia para que ello pueda ocurrir.
Scocco ya dio el visto bueno: contó que en buena parte de su carrera actuó como segundo punta junto a un centrodelantero, como lo hizo durante ese año algunas veces con Ezequiel Ponce, por ejemplo, cuando Américo Gallego era el entrenador leproso. Y también aseguró haber actuado como extremo, una posición que podría ocupar para poder hacerle un lugar a Boyé en el ataque rojinegro.
Para que ambos puedan jugar juntos, Bernardi debería prescindir de un volante. Teniendo como referencia el último partido ante Nueva Chicago, una opción sería romper el doble cinco que conformaron Hernán Villalba y Hernán Bernardello y jugar con un solo mediocampista de contención ante Lanús.
Y luego decidir dónde ubicar a Maxi Rodríguez. El capitán leproso podría actuar como una especie de mediapunta detrás de Scocco y Boyé en un sistema 4-3-1-2, o bien ubicarse como extremo izquierdo, que Boyé vaya por el centro y que Scocco juegue abierto a la derecha, en el 4-3-3 que Newell’s usó durante tanto tiempo.
El entrenador rojinegro también podría diagramar un 4-4-2 y mantener el doble cinco ante el Granate el próximo sábado. Maxi Rodríguez jugaría entonces como volante izquierdo y en el otro sector lo haría Denis Rodríguez (o algún eventual reemplazante), quedando Lucas Mugni fuera del equipo.
Obviamente, todo está sujeto a las decisiones tácticas que Bernardi decida tomar después de la paupérrima actuación de la Lepra ante Nueva Chicago en Mataderos. Pero la alternativa de ubicar juntos a Boyé y Scocco es viable. Sólo es cuestión que el DT decida cómo implementarlo.