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Se acerca la definición por el futuro del hospital Italiano

El juez Quiroga comunicará hoy si los aspirantes a gerenciar el centro de salud cumplen con los requisitos exigidos.

El juez Civil y Comercial Nº7 Marcelo Quiroga dará a conocer hoy si las propuestas que hicieron en el juzgado los interesados en quedarse con el gerenciamiento del hospital Italiano cumplen con los requisitos que les exigió, especialmente lo referido a preservación de puestos de trabajo, canon a pagar y el destino de los contratos de servicios médicos con las dos principales obras sociales que conserva el centro de salud, Pami y Iapos.

A la vez, el magistrado se tomará al menos una semana más para elegir al gerenciador del hospital por los próximos veinte años como mínimo.

Cabe recordar que Quiroga tiene tres propuestas en estudio: la Asociación Mutual Argentina, La casa del Médico Mutual y la asociación civil Nuova Medicina.

Detrás de la primera está la figura del empresario rosarino Fernando Riccomi; la segunda es el mascaron de proa del empresario de la salud originario de Rafaela Carlos Tita, y en la tercera, creada específicamente para esta pulseada, tiene como cara visible al cardiocirujano Rafael Díaz.

Descartada la autogestión del hospital por inviabilidad económica, el juez abrió el juego a las propuestas de privados, pero quiere garantías sobre el futuro de las fuentes laborales.

En septiembre pasado el plantel de empleados era de 500, pero la crisis institucional y la falta de cobro regular de salarios hizo que los que consiguieron se reubicaron en otros trabajos y el número final hoy es 395. La masa salarial alcanza los 4 millones de pesos mensuales sin tener en cuenta las cargas sociales.

Hay otros aspectos que el juez considerará hoy para definir quiénes siguen en carrera.  Garantías: evaluará calidad y cifras.

Canon: el futuro gerenciador pagará a la Sociedad de Beneficencia (propietaria del hospital) un monto mensual. El piso se fijó en 600 mil pesos, pero también cuenta el mecanismo que se ofrezca para actualizarlo.

Pami y Iapos: otro requisito es el futuro de los contratos con ambas obras sociales, hoy por hoy dos de los principales activos que ofrece a futuro el Italiano. Interventores y juez saben que es un arma de doble filo. Quieren asegurarse de que esos contratos queden dentro del Italiano y que no sean derivados o vayan a consolidar la caja de los otros negocios que tienen quienes hoy aparecen como oferentes.

Italmedic: una preocupación similar existe para garantizar las prestaciones a todos los afiliados actuales a Italmedic. La prepaga propia, por las características y función social del hospital, tiene un promedio de edad de beneficiarios que podría considerarse alto, y por tanto más costoso. Se busca que cantidad y calidad de prestaciones no sean una variable de ajuste.

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