La peor de las noticias para una familia se terminó confirmando. El cadáver hallado el miércoles por un pescador en el río Carcarañá a la altura de Timbúes es el de Valentín Uriel Moreno, el chico de 3 años que se encontraba desaparecido desde el último 12 de mayo. Según informaron desde el Ministerio Público de la Acusación, pasado el mediodía de ayer sus familiares directos realizaron un reconocimiento de las prendas encontradas y también del cuerpo, y el resultado fue positivo. El informe preliminar de la autopsia dio como causa de fallecimiento el ahogamiento y que su muerte habría ocurrido a los pocos minutos de ingresar al agua.
En un primer momentos se iba a hacer sólo el reconocimiento de prendas y esperar el ADN del cuerpo, dado el estado avanzado de deterioro tras tantos días en el agua, pero la familia accedió a realizar el reconocimiento del cuerpo dando certeza que se trata de él.
Apenas el pescador encontró el cuerpo de un niño intervino personal de Prefectura Naval Argentina y el fiscal Juan Ledesma, por parte del Ministerio Público de la Acusación unidad San Lorenzo. El cuerpo fue derivado al Instituto Médico Legal de Rosario para que se le practicara la autopsia.
Por sus características, ya comenzaban a correr las sospechas de que podía tratarse de Valentín, quien era intensamente buscado y que había sido visto por última vez en su casa ubicada en barrio Formoseño, en la localidad de Correa, departamento Iriondo, a 60 kilómetros al oeste de Rosario, mientras jugaba con su hermanastra Guadalupe, de 4 años, en el patio de la vivienda. El barrio está a orillas del río Carcaraña y se accede al mismo cruzando un puente que lo conecta con la ciudad homónima. Pasadas las 15 de ese día, el padre del niño, Diego Moreno, y su pareja Jessica –madre de la niña que jugaba con Valentín– denunciaron la desaparición. Desde entonces se desplegó un intenso operativo de búsqueda por tierra, agua y aire con varias lanchas, patrullas, avionetas y hasta drones. Participaron de los rastrillajes personal policial, bomberos y la Policía de Investigaciones.
