Por la octava fecha del torneo Nacional del 76 y a escasos cuatro días de su debut, Diego Armando Maradona jugaba como titular en Rosario. Fue contra Newell’s, que ganó 4 a 2, hace 34 años.
El genio de Villa Fiorito tenía 15 años y faltaban seis días para su cumpleaños (dentro de cinco días cumple 50) número dieciséis. El director técnico era Juan Carlos Montes, aquél que sacó campeón a Newell´s en el 74. Esa tarde lo hizo jugar a Diego como puntero izquierdo y lo marcó Andrés Arturo Rebottaro.
Maradona ya era un jugador descollante en los entrenamientos con profesionales en cancha de Comunicaciones donde practicaba Argentinos Júniors. Había sido llevado al club por Francisco (Francis) Cornejo, seis años antes. Es conocida la historia de Diego junto a “Goyo” (Gregorio) Carrizo, otro pibe, a prueba.
En el 74 fueron brillantes protagonistas con “Los Cebollitas” de los Torneos “Evita”, disputados en Embalse Río Tercero, Córdoba. El equipo de Maradona llevaba más de 120 partidos sin perder y cayó ante un juvenil riojano, deslumbrado por el zurdo retacón y lleno de rulos.
Ricardo Pellerano, ex River, era el “2” y capitán en el equipo que llegó a Rosario. “Diego ya era un crack y nosotros lo sabíamos de verlo jugar en las prácticas. Con 15 años encaraba a todos. Imparable”, dijo el popular “Bicho”, actual funcionario de Puertos en Vicente López.
El “enganche” de ése conjunto fue Mateo Di Donato, ex jugador de Aldosivi de Mar del Plata, campeón de la Liga local en 1973 y representante marplatense en torneos nacionales del 74 y 75. Habilidoso e inteligente, Di Donato llegó adquirido por Argentinos Júniors. “Diego deslumbró enseguida. En agosto del 75 cuando River le ganó a Argentinos Júniors, ambos con la Cuarta por la huelga de profesionales, Maradona hizo jueguito en el entretiempo y fue aplaudido por 60 mil personas”, contó Di Donato.
Curiosamente, en Newell’s otro joven, con 21 años, se destacó esa tarde de octubre en el Parque Independencia. Se afirmaba como titular Américo Rubén Gallego en el Rojinegro. Ambos alcanzarían larga fama tres décadas después.
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