El ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez, consideró ayer que se duplicará la producción de trigo y que llegará a 14 millones de toneladas en la actual campaña 2010/11. “Este año vamos a duplicar la producción de trigo aumentando un millón las hectáreas sembradas”, dijo el funcionario, para destacar luego que hay “que promover más trigo, más maíz y más girasol” con relación al crecimiento que motivará la implementación del Plan Agroalimentario 2010/16.
Domínguez proyectó un área de siembra de 4,3 millones de hectáreas del cereal en todo el territorio agrícola argentino. En tanto, según estimaciones de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) difundidas por la Bolsa de Comercio de Rosario, en la zona núcleo (sur de Córdoba, sur santafesino y norte de Buenos Aires) la siembra de trigo podría alcanzar las 400 mil hectáreas en la actual campaña.
“Tenemos condiciones espectaculares para la largada del trigo 2010/11 en la región por reservas de agua y condiciones térmicas, que marcan un año más frío que lo normal. Sin embargo no serían suficientes para tentar un aumento significativo en las hectáreas del cereal en la zona núcleo. La marca para la intención de siembra de trigo en la región es de 400 mil hectáreas, aunque todavía hay dudas”, indicaron desde GEA.
Por otra parte, de acuerdo con el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la siembra de trigo continúa “muy complicada” sobre las zonas sudoeste de Buenos Aires y oeste de La Pampa por falta de lluvias.
Ante este panorama, la entidad porteña estimó que se ha sembrado algo más de una cuarta parte del área proyectada (todavía) en 4,2 millones de hectáreas. Es decir que, en números absolutos, se implantaron 1,09 millones de hectáreas.
Respecto del cuidado del suelo, Domínguez aseguró que “los estados provinciales y nacionales tenemos que garantizar el tratamiento de nuestro principal recurso; para eso estamos trabajando con los organismos de medio ambiente”. “Esto también lo debemos hacer en concordancia con los actores privados porque todos esperamos cuidar la tierra para garantizar una mayor producción”, afirmó el funcionario en declaraciones radiales.
Mientras que productores del sur de Buenos Aires adelantaron que van a sembrar menos trigo y más cebada y arveja ya que ponen en duda el futuro triguero por “la intervención oficial”. Si bien reconocen que este año el perfil del suelo tiene la humedad ideal y que disponen de la tecnología para altos rendimientos, el futuro de los precios y la posibilidad de que se pueda vender el cereal los hace vacilar en plena época de siembra de la cosecha fina.
El anuncio del Ministerio de Agricultura, que aún no fue publicado en el Boletín Oficial, de que se liberarán permisos de exportación de trigo de la nueva campaña 2010/11 por un volumen cercano a los tres millones de toneladas no ha generado mejora de los precios futuros.