Autoridades de la región chilena de Atacama activaron los protocolos de seguridad ante un gigantesco socavón que se formó en las inmediaciones de Mina Alcaparros, en Tierra Amarilla. El Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) informó que el enorme pozo tiene unos 32 metros de diámetro en la superficie y una profundidad de 64 metros. El municipio advirtió sobre las consecuencias de la actividad minera, mientras continúan las investigaciones para saber qué fue lo que ocurrió.
“El día de ayer recibimos una denuncia ciudadana respecto de un socavón que se habría producido aquí en nuestra comuna cerca de Mina Alcaparros, que es parte de Minera Candelaria”, explicó este domingo el alcalde de la comuna Tierra Amarilla, Cristóbal Zúñiga. “Nos preocupa, ya que es un temor que hemos tenido siempre como comunidad, el hecho de estar rodeados de yacimientos mineros y trabajos subterráneos bajo nuestra comuna”, agregó.
El funcionario destacó que el socavón “sigue activo, sigue en crecimiento y es algo que no se había visto en nuestra comunidad”.
El fenómeno cobró relevancia nacional. El delegado presidencial de la Región de Atacama, Gerardo Tapia, ordenó al Sernageomin “una revisión en terreno”, y la Secretaría Región Ministerial (Seremi) de Minería de Atacama envió expertos para inspeccionar el terreno.
“Nosotros solicitamos que se pueda esclarecer cuál es el motivo y por qué se produjo este evento, cuáles son las razones, si es que el derrumbe es producto de la actividad minera que por debajo o si es que se trata de otra naturaleza”, insistió el jefe comunal. “Llegaremos hasta los últimas consecuencias como municipalidad para proteger a nuestra comuna y de una vez por todas acabar con estos abusos y con la contaminación desmedida de estas mineras”.
Este lunes, el Sernageomin informó que el diámetro del socavón es de 32 metros en superficie, y que su profundidad es de 64 metros.
No es la primera vez
El socavón se formó en la Mina Alcaparrosa, dependiente de la Minera Ojos del Salado.
Anteriores fenómenos similares se sucedieron en el sector de la Mina Santos (década del 90), cerca de la población La Calera, y en la quebrada Meléndez, en 2013, en las proximidades de la población Luis Uribe. Las investigaciones de ambos casos, si es que llegaron a conclusiones, nunca fueron hechas públicas.
El último hundimiento se conoció alrededor de las 18 del sábado, cuando personal de la minera Ojos del Salado informó el colapso de tierra que dejó un enorme agujero en la comuna de Tierra Amarilla.
