Este domingo a la madrugada se incendió el comedor El Alfarero, de Juan B. Justo 2085 (y Travesía, en zona norte). Las llamas arrasaron con todo. «No quedó nada. Aparentemente, el fuego fue producto de un cortocircuito», dijo Jairo Lucero, más conocido como el «Chinwenwencha», uno de los 12 voluntarios del lugar.
El joven fue protagonista de uno de los videos virales más populares el año pasado con su frase: «Te la tomaste toda chinwenwencha».
Lucero, contó a El Ciudadano que necesitan alimentos no perecederos, chapas, tirantes, ladrillos y ropa, entre otras cosas. «El comedor mide 11 metros por 8. Ahora lo vamos a llamar El Nuevo Alfarero», dice.
El comedor comunitario de barrio Arroyito funciona hace tres años y es parte de la propia casa de Fabiana y Gustavo (los encargados del lugar). Allí, pasan cerca de 200 personas por día a buscar su plato de comida. «Desde que comenzó la pandemia se duplicaron las raciones de alimentos», aseguró el joven.
«Perdimos todo lo material. En el depósito estaba guardada la mercadería para darle de comer a los vecinos. Espero que la gente sea solidaria y pueda ayudarnos», añadió.
Por El Alfarero pasan diariamente personas de todas las edades: muchos chicos y también grandes. «Antes armábamos los tablones y comían acá. Ahora, por la pandemia, la vienen a buscar y se la llevan», explicó Lucero.
El comedor no recibe ayuda de ninguna área del Estado y los que colaboran son personas del barrio y de distintos puntos de la ciudad.
El «Chinwenwencha», hincha de Rosario Central, trabaja 12 horas diarias en un taxi y dedica parte de su tiempo a darle una mano a los que la están pasando mal. «Soy solamente un nexo entre el comedor y las personas que colaboran. El hambre no tiene colores», sostuvo.
Los que quieran colaborar con el Nuevo Alfarero pueden llegarse al comedor de barrio Arroyito o llamar al 156-636527.
La «cargada futbolera» que sigue vigente
La cargada de Jairo había aparecido en un grupo de amigos de Whatsapp: se grabó y lo mandó sin saber que se convertiría en el protagonista de uno de los videos más virales, hasta ganarse el apodo de «Chinwenwencha».
El joven, fue uno de los tantos que festejaron el título de la Copa Argentina, luego de la final con Gimnasia y Esgrima de La Plata, en Mendoza. Sin embargo, la repercusión de aquella gastada fue mucho más allá que cualquier otra.
El «Chinwenwencha” no es un apodo, sino una «broma de su familia», contó el canalla. «Lo dice mi sobrinita, la hija de mi hermano mayor. Se me ocurrió usarla como una gastada a la hora de celebrar el primer título auriazul en 23 años, dando cuenta de cierta paternidad que hay sobre Newell’s», cerró.
