Este jueves, bomberos lograron sofocar un incendio dentro de un galpón ubicado en predios de la Central Nuclear de Embalse.
Las llamas afectaron el galpón E6 del sector GSPC de la central atómica donde están ubicados talleres anexos, según indicaron desde la empresa Nucleoeléctrica Argentina.
El fuego fue controlado por dotaciones locales de bomberos tras el llamado de alerta pasadas las 20.30 de este jueves. Participaron además efectivos de Gendarmería Nacional, Bomberos Voluntarios y personal del Departamento Unidades de Alto Riesgo de la Policía (DUAR).
La empresa Nucleoeléctrica Argentina informó que la situación pudo ser controlada y precisó que se trató de un “principio de incendio” originado en un “área periférica de la Central Nuclear”.
“Cabe destacar que el incidente no representó riesgo alguno para la operación de la central, que continuó generando energía de manera segura mientras se controlaba la situación”, indica el comunicado.
«Los daños registrados por el incendio son únicamente materiales, sin damnificados entre el personal de la central ni de las fuerzas de respuesta”, finaliza el texto.
Sin embargo, desde la Fundación para la Defensa del Ambiente (Funam) mostraron preocupación por le incendio. En ese marco, Raúl Montenegro, doctor y profesor titular de Biología Evolutiva Humana en la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba, y presidente de la fundación, indicó: «Si NASA la operadora de la central nuclear, con todos los recursos, protocolos y experiencia que dice poseer, no logra evitar un incendio en una simple instalación, el hecho es gravísimo. Podría haber ocurrido cerca de los silos, o en el edificio del reactor. Un doble aplazo para NASA y sus autoridades. Primero, el incendio no debió ocurrir«.
En esa línea, cuestionó que los pobladores de la provincia de Córdoba se enteraran de lo sucedido a través de medios y no por una noticia oficial, nacional, que diera todos los detalles, incluida distancia de lo ocurrido respecto de los silos y el reactor. «Es tal la lentitud de reacción e irresponsabilidad de las autoridades nucleares, que solo describieron lo ocurrido cuando la comunidad ya había escuchado las noticias, o había visto el incendio desde la distancia», puntualizó.
Montenegro, que integra el MARA, Movimiento Antinuclear de la República Argentina, y es director del Campus Córdoba del Right Livelihood College, también sostuvo que «cuando en un lugar supuestamente tan controlado no se logra evitar un incendio, es inevitable pensar que también el reactor o los silos pueden estar tan escasamente vigilados y controlados como el lugar que se quemó».
El titular de Funam agregó que el incendio «ocurrió el mismo día en que se registró un sismo de magnitud 4,6 en la escala de Richter, 16 km al sudoeste de Jesús María, y que fue percibido en la mayor parte de la provincia».
«Esto nos lleva a denunciar un vacío inconcebible a nivel de prevención. Aunque resulte sorprendente, el total de la población de la provincia de Córdoba sigue sin estar preparada para el peor accidente o evento nuclear posible, nivel 7 en la escala del INES», indicó el Biólogo y puntualizó que las autoridades nucleares siguen haciendo simulacros de accidente menor en un radio de solo 10 kilómetros alrededor de la central. «Un área tan limitada contrasta con lo que ocurre en el peor accidente posible», agregó.