Tras el receso invernal y luego de las pruebas oficiales realizadas mañana volverá el ruido de los motores de la máxima categoría del automovilismo mundial.
En una temporada donde muchas serán las modificaciones y novedades, el primer gran cambio se dará en el lugar donde comenzará la actividad. Bahréin desplaza a Australia como puntapié inicial del Mundial y se presenta con un lavado de cara. El circuito de Sakhir estrena trazado. Ha crecido 887 metros, convirtiéndose en el segundo más largo del mundial después del de Spa-Francorchamps, con ocho nuevas curvas y cambios de rasante al inicio del segundo sector.
Este domingo se cumplirán 132 días de la última vez que se vio una bandera a cuadros ondear en un circuito de Fórmula 1 tras un Gran Premio. Entonces fue en Abu Dhabi y, ahora, el Gran Circo se encuentra a poca distancia, en Bahréin, para inaugurar la temporada más esperada de los últimos años.
El fichaje de Fernando Alonso por Ferrari, la unión en McLaren de los dos últimos campeones del mundo, Lewis Hamilton y Jenson Button, y el regreso de Michael Schumacher con Mercedes, fabricante que compró el antiguo Brawn GP para crear «la selección alemana» son alicientes que provocan en el aficionado a la F1 unas ganas por volver a ver la competición y disfrutar de un año que se presenta más que emocionante.
Entre tantas novedades resulta paradójico observar una cierta vuelta atrás. El Gran Premio de Bahréin será una mezcla de pasado, presente y futuro. Se eliminan los repostajes de gasolina, algo que variará enormemente las estrategias de los equipos a las que estábamos acostumbrados. Las paradas por boxes serán escasas y muy rápidas.
Incluso se podrán ver a las nuevas escuderías. Mercedes retorna a la máxima con la estructura de lo que fuera el Brawn GP pero con todo el apoyo oficial de lo que significa la casa automotriz alemana. Lotus, Virgin e Hispania también harán su estreno en la F1.
De las tres debutantes, Lotus y Virgin estuvieron en las pruebas invernales pero se mostraron lejos en los tiempos en relación a los de punta. Mientras que Hispania se presentó recién la semana pasada y llegará a Bahréin sin prueba alguna.