Todo baja veranear en febrero en la Costa Atlántica tiene sus ventajas. En primer lugar, las ciudades se ponen más serenas y la gente suele estar más dispersa que en el bullicioso enero.
Si uno va a cualquier playa de la Costa Atlántica en estos días lo primero que percibe es que la playa está más vacía. Sin embargo, cada vez son más los que deciden armar las valijas en febrero. Desde la Cámara Argentina de Turismo se estima una llegada de turistas que marcará un record en lo que vaticinan que será «la mejor temporada de los últimos tiempos».
Los precios descendieron entre un 20 y un 30 por ciento.
Un departamento para una familia tipo cuesta alrededor de $1.500 por quincena y uno de dos ambientes se paga entre $180 y $190 por día, con un mínimo de cinco días.
En marzo los precios bajan aún más.
La “sombra” también baja de precio. En Miramar, una de las ciudades más visitadas de la Costa, los precios también se reducen en febrero. En el balneario “Cacho” los precios descienden casi a la mitad. En relación a la hotelería, la disminución de los precios es relativa. “Algunos mantienen sus precios, otros bajan un poco para febrero y otros recién para la segunda quincena. También se hacen convenios con agencias para reducir los precios y hay promociones familiares según los días.
Algo que se ve mucho es la “reserva espontánea” en los fines de semanas.