Search

Se pide escuchar a los niños porque son los que más vivirán el cambio climático

La defensora de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes, Marisa Graham, ponderó que, pese a ser “vulnerables por partida doble” al cambio climático, los niños “son más capaces de pensar en términos de futuro más allá de su propia existencia” y consideró que sus “voces serán muy importantes”

Florencia Vaveluk

La defensora de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes, Marisa Graham, ponderó que, pese a ser “vulnerables por partida doble” al cambio climático, los niños “son más capaces de pensar en términos de futuro más allá de su propia existencia” y consideró que sus “voces serán muy importantes” en la construcción de consensos y propuestas para revertir el deterioro ambiental que los países americanos intentarán formular desde hoy y durante tres días en la ciudad de Buenos Aires y poner a consideración de Naciones Unidas.

El Palacio San Martín, sede de la Cancillería argentina y uno de los organismos del Estado nacional que auspicia la iniciativa, será sede de la denominada Primera Consulta Regional para América Latina y el Caribe para la redacción de la Observación General N°26 -un documento de Naciones Unidas sobre los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y Medio Ambiente, que pondrá foco en cómo revertir el impacto que tiene el cambio climático en las niñeces de la región.

La cita, la primera a nivel mundial en relación a la elaboración de la Observación General, reunirá a expertos gubernamentales designados por los Estados participantes, organismos multilaterales y ONGs. También participarán más de 50 niñas y niños y adolescentes en representación de Argentina, Uruguay, Brasil, República Dominicana, Colombia, El Salvador, Perú, Chile, Ecuador y Trinidad y Tobago.

“Para aquellos (los Estados, los organismos multilaterales y la sociedad civil) que tienen que custodiar por sus derechos a nivel global, es importante primero cumplir con el derecho del niño a ser oído porque son los que más van a vivir los efectos del cambio climático”, enfatizó Graham.

En América Latina y el Caribe viven 188 millones de niños, niñas y adolescentes que padecen, entre otras muchas, las consecuencias del cambio climático

Según datos de Unicef, en América Latina y el Caribe viven 188 millones de niños, niñas y adolescentes, quienes se ven afectados por el daño ambiental provocado por la pérdida de biodiversidad, la contaminación y el cambio climático. Entre las consecuencias que deben padecer se destacan la inestabilidad política y económica de sus países de origen, una desigualdad creciente, disminución de la seguridad alimentaria y del agua y mayores amenazas para la salud y los medios de subsistencia.

Argentina será anfitrión del encuentro regional. Por tal condición, Graham conversó sobre los principales ejes del encuentro y su importancia para el futuro de las niñeces en América Latina y el mundo.

“Esta observación, que hay que remarcar que es la primera consulta presencial que se va a hacer en nuestra región, pone en consulta al Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas al linkearlo con el cambio climático y con cómo las cuestiones que tienen que ver con el medio ambiente impactan o tienen efectos adversos en la garantía de derechos de niñas, niños y adolescentes. El impacto del cambio ambiental se acentúa en aquellos sectores más vulnerables. Y los más vulnerables, por una cuestión intrínseca, son los más chiquitos y las más chiquitas junto a los adolescentes. Primero, porque necesitan de otro para garantizar sus derechos, pero también porque las infancias y adolescencias tanto en la República Argentina como en el resto del mundo tienen una interseccionalidad de vulnerabilidades”, acota Graham, y continúa: “Por ejemplo, una nena de diez años que pertenece a una población indígena y que además no accede al agua segura. Hay distintas interseccionalidades que tienen que ver con el género, la etnia, con la situación cultural y socioeconómica, entre otras”.

Los más vulnerables al cambio climático son los países en desarrollo

Acerca de cómo impactan los riesgos del cambio climático sobre quienes se encuentran en condición de vulnerabilidad, la defensora apuntó: “El cambio climático hace que toda la población y la casa común que es la Tierra estén en riesgo, pero los que sufren más las consecuencias de ese riesgo son los más vulnerables, entre los que se encuentran los niños y adolescentes. Por un lado, hay maneras de mitigar esos riesgos y procesos de adaptación, que no quiere decir resignarse, sino ver cómo la humanidad empieza a transformar la naturaleza de una manera distinta y que se adapte a distintas circunstancias climáticas. Además, los más vulnerables al cambio climático son los países en desarrollo, frente a los países con una gran emisión de, por ejemplo, gases de efecto invernadero”, y sobre los  efectos del cambio climático que se acentúan en Argentina, dijo: “Hay efectos que nosotros ya estamos viviendo, como el desmonte de la Amazonia, que no solo generó problemas en Brasil sino que generó la desertificación y que la disponibilidad del agua segura esté cada vez más debajo de la tierra, 200 metros por debajo del nivel del mar en el chaco salteño, por ejemplo. Lo cual implica que las poblaciones, mayoritariamente pueblos indígenas que viven en esas zonas se vean afectados por aquel desmonte. Dentro de esas poblaciones, los más vulnerables y los que mueren por falta de agua segura son los recién nacidos, los bebés o los que están en la primera infancia ya que son los más afectados por la deshidratación y la desnutrición”.

Sobre por qué se eligió a la Argentina como anfitriona de este encuentro, Graham indicó: “El Comité de Derechos del Niño tenía particular interés en que las observaciones generales tengan una visión de esta parte del mundo, de Latinoamérica y el Caribe. Entonces, que la primera consulta se hiciera en la República Argentina es muy importante, porque consideraron que estábamos en las mejores condiciones de infraestructura y de institucionalidad. Como objetivos están, primero, incorporar la voz de las chicas y de los chicos y escuchar la voz de expertos de América Latina y el Caribe que puedan aportar una mirada del impacto que tiene el cambio climático en nuestra región. Y por primera vez, unir estos dos temas que no son tan sencillos, ya que los que somos expertos en derechos de los niños no solemos ser expertos en cambio climático y viceversa. Necesitamos que los expertos piensen en términos de infancias y adolescencias en relación al cambio climático, cosa que antes no existía.

Sobre qué tipo de aplicación tendría este documento, la funcionaria destacó: “Una vez que se apruebe por el Comité y se publique, el documento va a formar parte de lo que nosotros llamamos el “corpus iuris” de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, en el que también tenemos la Convención sobre los Derechos del Niño y otros tratados de derechos humanos, que además tienen rango constitucional. Esos tratados se han ido enriqueciendo por lo que se llama la doctrina internacional, que son estas observaciones de los comités que velan por el cumplimiento de cada uno de los tratados de derechos humanos, de los cuales la Argentina es signatario de casi todos. Entonces lo que llamamos el «corpus iuris» se va enriqueciendo y adecuando a estos nuevos tiempos.

Bonus New Member
linitoto
dongjitu
slot depo 10k
10