El comité de emergencia por la crecida de los ríos en Santa Fe más las lluvias intensas registradas desde el comienzo del 2016 se reunió ayer en Rosario. Tras analizar la información de las distintas reparticiones y una reunión con autoridades del Instituto Nacional del Agua confirmaron que el pico de la crecida de las cuencas se espera para la semana que viene. De igual modo, los niveles no bajarán hasta fines de febrero. En diálogo con El Ciudadano, el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías explicó: “Los niveles altos continuarán porque el primer trimestre del año tendrá la presencia del fenómeno El Niño con lluvias más frecuentes. La combinación de altos niveles del río y lluvias importantes traerá aparejado anegamientos en distintas localidades del nodo Rosario”. Siempre según contaron fuentes ministeriales ayer, luego del pico de crecida las cuencas se estabilizarán y bajarán un poco para luego volver a crecer.
Ante el panorama obtenido en la reunión de ayer el gobierno de Santa Fe releva por estas horas el estado de las defensas y bombea reservorios hídricos ante la posibilidad de desbordes. En la actualidad, sólo hay autoevacuados en Villa Constitución y Villa Gobernador Gálvez. “Son familias o personas que por sus propios medios han encontrado una ubicación propia por este tiempo. Evaluamos la posibilidad de que ese número se aumente en los próximos días”, indicó Farías y sumó otras 10 personas de Rosario que dejaron sus casas ante la avanzada del agua. A los posibles evacuados en la región Farías pidió que recurran a las autoridades de cada localidad que están en contacto permanente con autoridades de la secretaría de Protección Civil. “Todas las necesidad se cubren. El que necesite evacuarse se le dará un lugar, luego las asistencias de los centros de evacuados que están a cargo del gobierno provincial. Después las tareas de regreso serán acompañadas por el Estado”, precisó Farías y agregó: “No estamos en una situación de gravedad pero tomamos las medidas de prevención”.
En diálogo con este medio, el referente de la Secretaría de Protección Civil, Marcos Escajadillo confirmó que en total hay 1.550 evacuados en Santa Fe por inundaciones y anegamientos ligados a la subida de las cuencas y las fuertes lluvias registradas a principio de la semana. Desde hace días en las localidades costeras el gobierno montó centros de evacuados, desde departamento General Belgrano hasta Villa Constitución. En particular en Las Toscas, Reconquista, Arroyo Leyes, Arocena, Villa Constitución y Pueblo Casas, ésta última localidad fue afectada por las intensas lluvias al igual que María Susana, donde llovió 200 mililitros en pocas horas a principio de la semana.
“Se realizan tareas de bombeo para evitar que las defensas de las localidades sean superadas y el agua llegue a las calles. La secretaría de Protección Civil monitorea las estaciones de bombeo. Se trata de equipos y maquinaras para sacar agua, entre otros elementos que tiene las localidades para que estén preparadas. Debemos corroborar que están en óptimo funcionamiento. Son equipos dados por la provincia a los municipios y comunas costeros en su mayoría. Pero también las hemos distribuido estratégicamente en otras localidades”, indicó Escajadillo, quien se mostró confiado en que no aumentará el número de evacuados.
Para ser voluntarios
El gobierno creó un registro de voluntarios para colaborar con tareas de asistencia ante la emergencia hídrica. Los interesados ayudarán a construir bolsas para fortificar las defensas de las localidades y demás tareas en los centros de evacuación. Según explicó Pablo Lamberto desde el Gabinete Joven de Santa Fe, se pueden registrar a través del sitio web del gobierno provincial –www.santafe.gov.ar–, llenar un formulario online y esperar la convocatoria de Protección Civil para ayudar.