Entre el jueves y la madrugada del domingo se llevaron a cabo unos 500 controles de tránsito. En total se enviaron 74 unidades al depósito municipal
La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana municipal llevó a cabo cerca de 500 intervenciones durante este fin de semana largo. De acuerdo a los datos vertidos desde el área, se remitieron 74 vehículos al corralón, 43 de ellos porque sus conductores estaban alcoholizados y otros seis casos por narcolemia.
“Intensificamos la presencia del Estado en las calles durante la Semana Santa para garantizarles a todos los ciudadanos una permanencia y circulación segura en los espacios públicos”, señaló el secretario de Control y Convivencia, Gustavo Zignago.
Los operativos se montaron en distintos puntos de la ciudad, en especial en horarios nocturnos y en lugares estratégicos. Cabe destacar que los agentes municipales actuaron con la colaboración de la Policía de la provincia.
De acuerdo al informe de la Secretaría de Control, este sábado terminaron en el depósito municipal 17 vehículos debido a que a sus conductores el control que se les practicó arrojó que tenían más de 0,50 gramos de alcohol en sangre (el límite permitido para conducir). En uno de los casos, el resultado fue de 1,64 gramos de alcohol en sangre. En tanto, tras los controles se detectaron tres casos de narcolemia por consumo de cocaína y marihuana.
La madrugada del viernes, fueron 13 los rodados remitidos al corralón por casos de alcoholemia. A uno de los conductores se le detectó más de 2 gramos de alcohol en sangre. También hubo dos remisiones por consumo de marihuana y cocaína.