De la tan mentada informalidad a la legalidad. El Sindicato de Vendedores Ambulantes prepara una megaferia “cerrada” en Villa Gobernador Gálvez para dar otro paso hacia la formalidad laboral. El proyecto prevé alojar 600 puestos en un predio de 3.200 metros cuadrados, donde se venderá “un poco de todo”.
Beto Riba, secretario general del Sindicato de Vendedores Ambulantes (Sivara), adelantó detalles del proyecto a El Ciudadano: “Estamos armando una feria para 600 feriantes. La iniciativa es para empezar a trabajar el paso de la informalidad a la legalidad”. El gremialista, que también está al frente de un local de comida en zona sur, prevé inaugurar la feria en septiembre, donde habrá puestos de «panificación, carnicería, bijouterie, artesanías. Un poco de todo”, resume Riba.
La feria en cuestión se emplazará en el predio de la ex fábrica Cirubón –firma que hoy está en proceso de hacerse cargo de Mefro Wheels–, en la intersección de las calles San Martín y avenida La Plata, a dos cuadras de la cancha de Coronel Aguirre.
Riba, también referente de la bailanta, se apresuró a aclarar: “No se trata de una Salada. No quiero que nos emparenten con el trabajo esclavo y la mala prensa que tiene la feria bonaerense”.
La Feria Cerrada, si todo sale de acuerdo con los planes de Sivara, abrirá en septiembre. Por el momento, la idea es abrir tres días a la semana: viernes, sábado y domingo de 12 a 17.
“Todos aquellos que quieran participar tienen que tener monotributo. Ese es el requisito. De esa manera podremos tributar de acuerdo con la ley”, aclara Riba.
Para el también referentes de la cumbia, el proyecto no es ajeno a la realidad social y económica que vive la región y el país. Y abrir la feria lo antes posible es una cuestión que lo desvela. “Nos apuran los tiempos de crisis. Hay miles de familias que se quedan sin trabajo. Eso genera más inseguridad, falta de contención. Uno llega a la casa y no tiene para darle de comer a sus familias. La feria es una alternativa que hay que destacar. Este es un gremio que invierte en sus afiliados. Estamos comprando un lugar, haciendo una inversión muy grande para que la gente tenga sus exposiciones”.
Riba expresó que la idea surgió hace meses en discusiones con afiliados de Villa Gobernador Gálvez. “En Rosario tenemos la famosa ordenanza 7.703, que regula la venta ambulante y establece que para vender en la ciudad hay que tener mínimo dos años de permanencia”. El referente aclaró que son muchos los villagalvenses que se acercaron al gremio, y de esas reuniones nació el proyecto.
Obra social en marcha
El polifacético gremialista aprovechó para adelantar que este miércoles el sindicato que preside estrenará obra social. «Si Dios quiere, mañana inauguramos la obra social Sivara Salud. Queremos que nuestros afiliados tengan una obra social y una jubilación como corresponde. Queremos trabajar en el tema de la informalidad –como le llaman– hacia la legalidad», remarcó Riba.