El conocido economista rosarino Salvador Di Stefano anticipó que la inflación en dólares en este 2024 para las propiedades será «altísima» y lo mismo ocurrirá «con autos, motos y muebles». Lo hizo en el marco de los informes que suele brindar. Los datos y predicciones que entregó el consultor retumbaron y no dejaron de llamar la atención.
«La devaluación y la inflación tendrán este año un comportamiento inverso al del 2023 porque el año pasado la suba del dólar fue de más del 350% y la de precios del 211%. Pero, en 2024, la devaluación será del 120% y la inflación del 220%», explicó Di Stefano, quién anticipó un fuerte aumento de las propiedades
«Esto generará una inflación en dólares anual cercana al 70%. Lo que significa que los departamentos y viviendas costarán en la divisa estadounidense un 70% más hacia fines de año«, agregó el conocido consultor.
«Si tenemos en cuenta que aumenta la madera, el cemento, el yeso, los azulejos y el costo de los materiales pero el dólar sigue quieto, es obvio que cada metro cuadrado construido será más caro mes tras mes. Lo mismo pasará en dólares con las motos, los autos o los muebles para las casas. Ocurrirá en todos los rubros», vaticinó el experto.
Y tras eso, mencionó: «En la práctica, significa que quien encanuta los verdes hará un pésimo negocio ya que comprará menos con el mismo dinero dentro de poco. Si tenemos en cuenta que los argentinos tienen entre 200.000 y 300.000 millones de dólares en cajas de seguridad o en los colchones, no es una buena noticia para ellos».
El dólar dejará de ser negocio contra la inflación en 2024,
«Atesorar la moneda de Estados Unidos será este año una mala decisión en nuestro país. Hay que pasar de la reserva escondida a otro tipo de inversiones», sostuvo luego.
Como cierre, entregó un ejemplo muy particular para entender lo que se viene: «La economía es como los boliches bailables: si te cambian la música tenés que cambiar el paso de baile. La música del kirchnerismo era con nafta casi regulada y un Ford Falcon viejo. Lo mismo pasaba con un aire acondicionado ineficiente. Nadie lo cambiaba porque la luz era muy barata y el combustible también. Hoy, la electricidad será cara y ocurre lo mismo con el gas. Ni que hablar del combustible. Hay que invertir en otro tipo de electrodomésticos, tejerle un pullover al perro y buscar otros rodados. Va a cambiar la forma de consumir y hacer dinero».