Ante episodios de violencia registrados en dependencias de salud municipales, como es el caso del centro San Marcelino Champagnat, ubicado en Castellanos al 3900, que tuvo que cerrar sus puertas la semana pasada por estos motivos, el concejal Diego Giuliano destacó la necesidad de implementar el Programa de Seguridad Hospitalaria Municipal aprobado por el Concejo hace dos años y que hasta el momento no ha sido ejecutado.
“Hace casi dos años que existe una ordenanza que exige la confección de un Programa de Seguridad Hospitalaria. Sin embargo, ese plan no ha sido puesto en práctica y en estos últimos años crecieron las agresiones y los robos hacia el personal de la salud, acentuados aún más por la escasa presencia policial en los barrios y la salida de Gendarmería”, manifestó el edil.
Ese plan encomienda la instalación de botones antipánico para el personal en situaciones de riesgo. También manda elaborar un nuevo protocolo de acción policial, con puestos fijos de vigilancia, y una línea telefónica gratuita 0800 conectada al centro de monitoreo para que el equipo de salud llame a la Policía en situaciones complejas de violencia.
Según Giuliano, “no es razonable que gran parte de los rosarinos no puedan acceder a los centros de salud municipales que se encuentran obligados a cerrar por falta de prevención en materia de seguridad, siendo víctimas constantes de robos y agresiones”.
Paro de médicos
Con importante adhesión se cumplió ayer la huelga decretada por los médicos nucleados en Amra y Siprus, quienes reclaman la reapertura de paritarias. No hubo concurrencia a lo lugares de trabajo y, como se anunció, sólo se mantuvieron guardias mínimas. El gobierno provincial ya avisó que por ahora no negociará salarios.