En una reunión llevada a cabo ayer en la sede local de la Gobernación, donde participaron el subsecretario de Coordinación de Políticas Preventivas, Fernando Peverengo, el coordinador de Seguridad Deportiva, Diego Maio, el jefe de la URII, Marcelo Villanúa, y los presidentes de Central y Newell’s, se definió el operativo de seguridad para el Clásico. Luego, el ministro de seguridad Maximiliano Pullaro se reunió con Raul Broglia y Eduardo Bermúdez y tras una charla, realizaron declaraciones.
Según se detalló, el operativo contará con 650 efectivos en la cancha y sus alrededores y 200 más en la prevención de puntos estratégicos en el resto de la ciudad y se extenderá hasta dos horas finalizado el encuentro.
Desde las 8.30 se iniciará con la requisa correspondiente del estadio, por parte del personal policial y la Brigada de Explosivos, y la apertura de puertas para el ingreso del público será a las 13, tres horas antes del inicio del partido.
Asimismo, las autoridades dieron precisiones sobre el tradicional banderazo que realizarán hoy a las 19 los hinchas leprosos, que tendrá 150 efectivos afectados.
Antes de finalizar el encuentro, Pullaro declaró: “Queremos pedirle a todos los hinchas de la ciudad que puedan vivir esto como una fiesta deportiva de la ciudad y que tomen el ejemplo de los presidentes de los clubes, que se manejan con buen diálogo”.
Que sea en paz
Bajo el lema “Violencia cero” en el Clásico, la presidenta del Concejo Municipal, Daniela León, junto a la promotora de la idea, la edila Agustina Bouza, recibieron junto a otros concejales a los presidentes de los dos clubes, Bermúdez y Broglia, y a los jugadores Víctor Salazar e Ignacio Scocco. La reunión se realizó en el despacho de la presidenta de la institución y en la misma se pudo observar un clima de camaradería.