Carlos Tevez, Gonzalo Higuaín, Mauro Icardi y Paulo Dybala. Presente y Futuro. O mejor dicho, trayectoria y realidad. ¿Qué tienen en común estos cuatros nombres? El extraordinario momento que pasan, pues los cuatro son los goleadores del Calcio italiano. Algo que no ocurría desde la época de Gabriel Batistuta, Abel Balbo y Hernán Crespo allá por los finales de los noventa y comienzos del nuevo siglo.
Dos consagrados, ganadores y hombres de selección. Otros dos en constante crecimiento que no dejan de asombrar con sus números y aseguran un recambio de calidad y cantidad para la Albiceleste en los próximos años.
Si hay un puesto en donde Gerardo Martino no tiene problemas, o si los tiene es de esos que los entrenadores desean por poseer superabundancia, es el de delantero centro. El Tata ya ha dicho que en su esquema madre hay lugar para uno de ellos. Esto sin olvidar a Sergio Agüero, quien es el máximo anotador de la Premier League. Eso hace que el entrenador nacional “será injusto” con alguno como ya lo ha manifestado porque no habrá lugar para todos.
Hace unos días amplió esto al decir que “con lo que hacen Tevez, Agüero e Higuaín en sus equipos ofrecen pocas posibilidades para el resto. Ellos no dan lugar a nuevas convocatorias por lo que hacen, pero aun así, con las próximas competiciones habrá posibilidades para los jóvenes”.
En esa nueva camada de noveles delanteros que asombran en sus equipos podrían estar Luciano Vietto, de extraordinario primer año en Villarreal de España y que ha despertado el interés de varios equipos grandes; Guido Carrillo, sin dudas el mayor crédito del fútbol local afianzado en Estudiantes y en carpeta de varios conjuntos europeos y ya con una cotización (el presidente Pincha Juan Sebastián Verón ya anunció que aquel que quiera al delantero tendrá que poner no menos de 12 millones de dólares) de viejo continente.
Pero principalmente este grupo es encabezado por un rosarino y un cordobés que vienen siendo noticia fecha tras fecha del campeonato italiano. Mauro Icardi y Paulo Dybala son realidad gracias a su presente, pero principalmente son el futuro en donde tanto el Tata –para sus próximos años de selección– como aquel que vendrá después, o incluso si él siguiera tras Rusia 2018, pueden descansar tranquilos sabiendo que material hay. En cantidad y calidad…
La tabla de goleadores en Italia disputadas 24 fechas la encabezan Icardi y Tevez con 14 tantos cada uno; seguidos de Dybala e Higuaín con 12 festejos. También el francés del Milan Jérémy Menez reúne 12. Pero todo hace indicar, de no pasar nada raro, que esta temporada y tras trece años (en 2001 Hernán Crespo con la camiseta del Parma fue el último) habrá un capocannoniere argentino (sería el noveno que se sumaría a la lista de Crespo, Guaita, Angelillo, Sívori, Mandredini, Maradona, Batistuta y Libonatti).
Talento que supera exposición
El rosarino Mauro Icardi es mucho más que el ‘muchachito’ que sale en las revistas del corazón o las redes sociales con un perfil alto “mostrando” parte de su intimidad. Mucho se lo ha juzgado por situaciones extrafutbolísticas que, al menos, acá no se tocarán ni mencionarán por nada.
Sí se resaltará, y mucho, lo que hace adentro de una cancha. Con apenas 22 años recién cumplidos (19 de febrero de 1993) se mueve como un delantero con una gran trayectoria. Desde chico asombró por su poder goleador en el UD Vecindario de Gran Canaria que despertó el interés de Barcelona y lo sumó a la Masía. Allí siguió con su costumbre de romper redes pero pasó a préstamo al equipo primavera de Sampdoria (algo así como la división reserva del fútbol argentino) donde fue goleador al punto que el equipo italiano adquirió su pase definitivo. La campaña 2012/13 lo tuvo en el primer equipo (marcó 10 goles en 31 partidos) y esa gran temporada lo catapultó al Inter que pagó 13 millones de euros ganándole de mano a Napoli y Liverpool, quienes también lo querían.
Su primer año como nerazzurri lo cerró con 9 tantos en 22 encuentros de liga. Pero en esta presente campaña definitivamente se transformó en un “asesino serial” del área. Un delantero que reúne todos los recursos. Es derecho pero define de izquierda con gran categoría (como el gol del fin de semana ante Cagliari), posee un gran cabezazo, sabe tirarse atrás para conectarse con el juego aunque no sea lo que más lo destaca. Alguien a quien no se le puede dar un centímetro dentro de la misma porque muy probablemente sea gol. Alguien que hace recordar, en ese sentido, mucho a Gabriel Batistuta. Porque principalmente Icardi parece un “animal del área” que vive por y para el gol.
Un diamante en bruto
El cordobés Paulo Dybala (15 de noviembre de 1993) con tan sólo 21 años ya atrajo las miradas de varios de los equipos más poderosos del mundo que lo tienen agendado para el próximo año; lo quiso la selección italiana, pero su destino es la casaca nacional.
A diferencia de Icardi (que jugó en juveniles y también en la mayor), el ex Instituto si bien aún no se puso la albiceleste ya dejó en claro su deseo: “Es un gran orgullo que el técnico italiano me quiera, pero soy argentino, quiero jugar para mi país y esperaré por esa oportunidad”, dijo no hace mucho tiempo. Y ese sueño podría cristalizarse en poco tiempo ya que ambos, junto a Icardi, son candidatos a estar en el Sub 23 que preparará los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro del próximo año.
Su explosión se dio en la campaña 2011/12 de la mano de Darío Franco, quien no reparó en su corta edad (tenía 17 años) y lo hizo titular en ese Instituto que quedó a un paso del ascenso a la máxima categoría. Su gran año (17 tantos en 40 partidos) hizo que Palermo de Italia se lo llevara. Allí, tras dos años de adaptación, uno en primera y otro en segunda (3 y 5 goles), en esta temporada llegó la explosión con un rendimiento que despierta elogios semana tras semana.
Tevez, Higuaín, Icardi y Dybala. El póker de ases que lucha por ser goleador en Italia y que le brinda una tranquilidad absoluta a Gerardo Martino para la selección. Por presente y futuro. Por experiencia y proyección; la 9 albiceleste está muy bien cubierta.