Los dos titulares de la Unidad Regional VIII y al menos tres oficiales superiores fueron pasados a disponibilidad ayer, luego de tomar estado público una investigación que, desde principios de mes, llevaba adelante la Dirección Provincial de Asuntos Internos por “su responsabilidad en un grotesco incidente” producido en un boliche bailable de Elortondo, en el departamento General López, para festejar un nuevo aniversario de la Policía santafesina. Según una denuncia presentada con fotos e imágenes tomadas con teléfonos celulares, junto al titular de la Policía departamental estaba un hombre condenado a prisión perpetua por el homicidio de su pareja. Además, se comprobó que una de las encargadas de organizar la velada, de la cual participaron unas 250 personas, era una mujer también condenada a perpetua, que solamente tenía permisos de salida para visitar a su familia cada 15 días.
El 31 de agosto pasado, la Policía de Santa Fe cumplió 146 años. Y, para que esto no pasara desapercibido, el viernes siguiente –3 de septiembre– desde la Unidad Regional VIII, con asiento en Melincué, se organizó una fiesta para homenajear a los uniformados.
El lugar elegido para el evento fue en el boliche La Fábrica, de la localidad de Elortondo, ubicada 30 kilómetros al noroeste de Melincué. Pero, según una denuncia anónima recibida en la Dirección de Asuntos Internos de la provincia, no sólo fueron miembros de la fuerza los que asistieron al evento.
De acuerdo con la causa que es investigada por la Justicia de Melincué y por el personal de Asuntos Internos, aquel día, el comisario mayor Marcelo Mario Gorosito, jefe de la UR VIII desde diciembre del año pasado, estuvo sentado a la mesa junto a Mario R.
El problema que surge de esta situación es que Mario es un hombre que fue condenado a prisión perpetua por el asesinato de su pareja, ocurrido hace 10 años, y no tiene permiso para abandonar la Alcaidía en la que se encuentra alojado. Las fuentes detallaron que el preso se quedó en el lugar hasta las 6 del día siguiente, cuando el mismo Gorosito lo devolvió al calabozo.
Pero Mario no fue en único reo que estuvo en el boliche por el evento. Según se desprende de la misma denuncia y fue constatado por los investigadores de Asuntos Internos, Nora Nélida R., quien también fue condenada a perpetua, pero por un crimen por encargo, fue llevada hasta el lugar para limpiar y acondicionar el salón para el evento, cuando en realidad solamente puede salir de la penitenciaría para visitar a sus familiares, cada 15 días.
La investigación comenzó el miércoles posterior al festejo, y para no entorpecer la pesquisa el jefe de Policía de la provincia dispuso otorgarle a Gorosito una licencia no ordinaria sino especial, dejando a cargo al subjefe de la UR VIII, comisario inspector Ricardo Salvador Grasso.
El viernes de la semana pasada, el secretario de Control de las Fuerzas de Seguridad, Facundo Paschetto, le exhibió las fotos y los videos presentados como pruebas al ministro de Seguridad Álvaro Gaviola, que habilitó la profundización de la investigación a los pesquisas.
Pero tras dos semanas de declaraciones y en base a testimonios de testigos reservados y filmaciones, en la tarde de ayer se decidió pasar a disponibilidad a los dos jefes de la Unidad Regional. Fuentes del caso indicaron que la misma suerte corrieron los jefes de la Agrupación Cuerpos, comisario Rafael Walter Reyna; el titular de Orden Público comisario Oscar Ledesma y el jefe de Judiciales de la Unidad Regional VIII, Rubén Benítez, ya que “según los informes de Asuntos Internos, tienen un grado de responsabilidad en el asunto”, confiaron fuentes del caso.