Tras un debate que llegó a sacudir el interior del bloque Socialista y de un costoso cuarto intermedio de 5 minutos (la votación de la pausa quedó en paridad y debió desempatar el titular del cuerpo, Miguel Zamarini) el Concejo Municipal aprobó ayer una iniciativa presentada por los concejales María Eugenia Bielsa y Fernando Rosúa que “premia” a los contribuyentes cumplidores: quienes opten por cancelar anticipadamente la totalidad de la Tasa General de Inmuebles, es decir pagar todo el año en el mes de enero, recibirán un descuento del 10 por ciento. Con esta medida se busca beneficiar a los contribuyentes que, precisamente por cumplir con los pagos al día, terminan quedando afuera de beneficios de rebajas o quitas –que se agregan como alicientes cuando se aprueban planes de pago– que reciben los planes de pago para regularizar deudas que no cumplieron en tiempo y forma.
Los ediles consideraron que resulta procedente implementar estímulos para los vecinos “como buena práctica de administración de los recursos del Estado”, premiando a quienes quisieran cumplir con las obligaciones en forma anticipada, “sin perjuicio de impartir justicia tributaria imponiendo el resarcimiento en concepto de intereses para los que así no lo hagan”. Y aseguraron que, independientemente de las bonificaciones que puedan otorgarse, es factible considerar la posibilidad de que el monto anual de la Tasa General de Inmuebles pueda ser cancelado en su totalidad anticipadamente ingresando el pago en el momento del primer vencimiento que se determine para el régimen mensual en vigencia. También evaluaron que esta opción permitirá al Ejecutivo contar con fondos propios con anterioridad a los vencimientos habituales previstos para su recaudación, una herramienta nada desdeñable dada “la situación financiera de la Municipalidad”, que así podrá contar con recursos “con menores costos a los que se obtienen en el mercado financiero o el que deriva del endeudamiento con los propios proveedores o prestatarios de servicios de la administración”. De igual modo, el descuento asegura fondos frescos, pero menores. El Ejecutivo puede vetar la norma si no la considera conveniente para las arcas del municipio.