“Las obras son necesarias”, evaluó el senador justicialista y presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Alcides Calvo, sobre el pedido de autorización del Poder Ejecutivo para tomar deuda por 1.000 millones de dólares y financiar, con esos recursos, obras de infraestructura en los 19 departamentos de la provincia.
Los senadores del Partido Justicialista (PJ), que tienen mayoría en la Cámara alta, decidieron citar a los ministros de Economía, Gonzalo Saglione, y de Infraestructura, José Garibay, para pedirles detalles sobre el proyecto aprobado el jueves 12 por la Cámara de Diputados. Después de esa reunión, que se realizará esta semana, los senadores tratarán el tema en el recinto. Podría ser el jueves 2 de junio, pero la fecha aún no está confirmada.
Como presidente de la comisión de Presupuesto, que debe dictaminar sobre la iniciativa, Calvo explicó que se trata de un “proyecto de gran cuantía” y que la provincia de Santa Fe “no está acostumbrada a tomar este tipo de préstamos, por eso queremos analizar el tema más profundamente en cuanto a la metodología y en cuanto a las obras que estarían incluidas en el anexo”.
—¿Cuáles son las dudas respecto a la metodología?
—No es lo que habitualmente venía haciendo la provincia, que es tomar créditos con organismos multilaterales. Esto es una emisión de bonos con características muy distintas, con tasas de interés que consideramos muy altas para este momento, dada la fuerte volatilidad del mercado.
Dudas por el monto
En un principio, el gobernador Miguel Lifschitz había planteado pedir autorización para que el Poder Ejecutivo pueda contraer deuda pública por 500 millones de dólares. En medio de la crisis hídrica causada por las lluvias de abril, el mandatario decidió redoblar la apuesta y puso como tope 1.000 millones de dólares.
Con los recursos que se obtengan a través de la emisión de bonos en el mercado internacional de capitales, la provincia ejecutará gasoductos, hospitales, rutas, desagües y cloacas. Según el gobierno, se trata de “proyectos de inversión pública que tendrán un importante impacto social y productivo” y “potenciarán los servicios disponibles para los ciudadanos”.
Al senador Calvo le generan algunas dudas las cifras planteadas por Lifschitz: “Veníamos barajando un monto de 500 millones de dólares, pero imprevistamente llegó a 1.000 millones sin ningún tipo de comentarios. Y una de las cuestiones fundamentales es que este gobierno no va a empezar a amortizar el préstamo, sino el próximo gobierno”. En efecto, en el proyecto se proponen plazos de 5 a 12 años.
El endeudamiento previsto representa casi 16 mil millones de pesos según la cotización actual del dólar. “Si analizamos cómo se ha venido desempeñando la provincia de Santa Fe en materia de obras públicas, vemos que en un año como 2015, netamente electoral, no se ha llegado a ejecutar el 60 por ciento de los recursos para obras. ¿Está en condiciones la provincia de tomar un crédito de estas características y poder utilizarlo en el corto y mediano plazo? Estas son las cuestiones que tenemos que analizar”, explicó el presidente de la comisión de Presupuesto del Senado.
“Queremos ser responsables”
La reunión pedida por el bloque de senadores del PJ con ministros de Infraestructura y Economía es para conocer en detalle las características del endeudamiento y “para tener la suficiente información para estar seguros de lo que vamos a votar”, según comentó Calvo.
—¿Qué plazos manejan?
—Nos tenemos que tomar el tiempo que corresponde, como Cámara de Senadores, porque somos conscientes de que las obras son necesarias, son muy importantes para el desarrollo productivo, pero también esas obras tienen que ser beneficiosas para toda la provincia. En ese aspecto, cada senador está tratando de buscar qué obras son prioritarias para sus departamentos.
—¿El justicialismo va a acompañar el pedido del gobernador?
—Queremos un tiempo para tomar decisiones lo más acertadas posibles. No estamos negando el endeudamiento porque estuvimos pidiendo las obras, entonces no podemos decir que no cuando al gobernador le estamos pidiendo rutas, acueductos, canalizaciones, gas, viviendas para toda la provincia. Pero queremos ser responsables de nuestras decisiones.
—¿Con la emisión de bonos, puede pasar lo mismo que ocurrió a nivel nacional con los fondos buitre?
—Todo es posible. Cuando se ingresa al mercado de capitales, donde hay una fuerte volatilidad, corridas y variaciones de las tasas de interés, por supuesto que hay riesgos. Pero somos conscientes de que a veces se debe recurrir a este tipo de financiamiento para poder encarar un plan de obras públicas. Si no, sería imposible.