En tiempos en donde la seguridad digital se volvió una prioridad para millones de argentinos que usan, día a día, su teléfono para hacer pagos, transferencias o manejar sus finanzas, los celulares viejos pueden ser un gran tesoro.
Es que los objetos cotidianos, aunque con sus años encima, encuentran nuevas oportunidades de uso; y ese celular que estaba ‘guardado en un cajón’ puede convertirse en una herramienta clave para proteger datos y, sobre todo, dinero.
Con solo restaurarlo a su configuración de fábrica, instalarle únicamente las apps necesarias, como las de los bancos y billeteras virtuales, y evitar vincularlo con otras cuentas personales o redes sociales, se puede transformar ese dispositivo en una verdadera «billetera digital» 100% funcional.
La gran ventaja de todo esto es que las operaciones financieras se mantienen separadas ‘de la vida cotidiana’. A su vez, permite ir al supermercado, a la carnicería y al kiosco y hacer compras con mayor seguridad, ya que si te roban tu celular principal, tu información bancaria no quedaría expuesta.
Y si se llegara a perder esta ‘wallet’, los daños estarían acotados, ya que el mismo no contendría fotos, contactos ni redes sociales, por lo que sería más fácil bloquear los accesos abiertos.
Sin embargo, hay que tener en cuenta un aspecto clave: de no tener un chip de telefonía adicional en el otro dispositivo, solo se podrán hacer operaciones si está conectado al WiFi de los lugares en donde se utilice. O, caso contrario, se puede usar el smartphone predeterminado, el que se usa todos los días, para enviarle internet al otro dispositivo.
Se trata así de una estrategia cada vez más popular entre usuarios que buscan mantener sus operaciones financieras lejos del radar habitual.
Además de una cuestión de datos y seguridad, también es una manera más que interesante de darle una segunda vida útil a un equipo que, aunque quizás ya no esté en condiciones para el día a día, sigue siendo perfectamente apto para usarse en tareas básicas. Como dice Favalli en la que es la frase más popular de la serie de Netflix, El Eternauta: «Lo viejo funciona».
Y en un contexto donde los fraudes digitales crecen, y en el que cada vez más los servicios financieros están 100% digitalizados, reutilizar un teléfono viejo con este fin puede ser una decisión inteligente, sustentable y, sobre todo, práctica.
Cómo transformar un celular viejo en una verdadera «billetera digital»
Transformar un celular ‘guardado en el cajón’ en una billetera digital requiere pocos pasos. Cómo hacerlo.
- Restaurá el celular a su configuración de fábrica: Esto elimina datos anteriores y posibles apps innecesarias. Dejá el equipo limpio y listo para un uso exclusivo.
- Instalá solo las apps financieras necesarias: Incluí tu homebanking, billeteras virtuales (como Mercado Pago, MODO o Ualá) y apps de pago o cobro, nada más.
- Desactivá funciones innecesarias y optimizá la batería: Quitá apps en segundo plano, desactivá notificaciones no esenciales y ajustá el brillo para que rinda más tiempo.
- Configurá un buen sistema de seguridad: Activá bloqueo con PIN, patrón o huella digital. También podés usar verificación en dos pasos en cada app financiera.
- Usalo como dispositivo exclusivo de pagos: No lo mezcles con redes sociales, mensajería o fotos. Es solo para operar tus finanzas con mayor seguridad.
