Los premios Estrella de Mar se entregaron el lunes rodeados de polémica. Más allá de las ternas cuestionadas y las presencias o ausencias una de las grandes denuncias de la noche fue que los ganadores no contaron con un micrófono disponible para agradecer, sólo algunos de ellos hablaron pero sin amplificación. Además los miembros del teatro El Séptimo Fuego que subieron al escenario para recibir una distinción por parte de La Sociedad General de Autores de la Argentina (Argentores) realizaron una intervención contra los tarifazos que no se vio en la trasmisión en vivo.
Una vez terminada la ceremonia la Asociación Argentina de Actores emitió un comunicado en el que señalaron: “Los premios a la labor actoral y a la producción artística en cualquiera de sus ramas tienen como característica contar con algunos minutos para agradecer o dirigir unas palabras al público, esto ha sido así desde siempre. Es quizá el verdadero premio, tener la oportunidad actores, directores, técnicos y productores de expresarnos desde quienes somos y dejar atrás por un momento la ficción que llevamos al escenario. Desde el agradecimiento o el compromiso con nuestros ideales, poder decir lo que sentimos o nos preocupa, visibilizar, si así lo decidiésemos, silencios impuestos a otros y luchas propias y ajenas. Nunca nadie, en estos actos, nos obligó a callar porque es sabido que no hay mal en decir lo que se piensa, aunque la historia de nuestro país dé cuenta de que por esta misma razón fuimos desaparecidos”, apunta el escrito que agrega: “Esta vez, alejados de la sensibilidad, la cultura o apenas el respeto básico, los Premios Estrella de Mar se visten de la imposición de nuestro silencio en una grosera muestra de temor oficial. Porque sólo es el miedo el que puede aconsejar tan mal. Y sólo tiene miedo quien se sabe culpable”.
Según relataron medios marplatenses las autoridades e integrantes del citado centro cultural subieron al escenario con mordazas en la boca para reclamar por la falta de oradores durante la entrega de los premios y se manifestaron en contra de los tarifazos con una bandera que rezaba: “Teatro en Riesgo”.
Los ganadores de la entrega de premios fueron Sugar, que se consagró como la obra más galardonada con cinco estatuillas y el premio de oro se lo llevó el cantante y actor rosarino Raúl Lavié. Entre las 35 estatuillas que se disputaban también fueron destacadas las obras Chorros, la comedia del robo al banco, la marplatense Fedra, una mujer ardiendo y Somos bien argentino, que se llevaron tres premios en cada caso.
