El agónico gol de Tijanovich cuando moría el partido en el Bosque platense era lo que le faltaba a Newell’s para terminar de agudizar una crisis que amenaza con llevarse puesto todo. El 0-1 ante Gimnasia en el estadio Juan Carmelo Zerillo lo hundió en el fondo de la tabla de los promedios de cara a la temporada que viene, en la cual la Lepra deberá realizar un campañón para evitar el descenso.
Los números no mienten: si el campeonato terminara hoy, el Rojinegro tendrá únicamente a los que asciendan abajo suyo. Es por eso que la preocupación es total por el Parque de la Independencia, que tras un prometedor arranque de año con Héctor Bidoglio al mando y el esperado regreso de Maxi Rodríguez, actualmente navega sin rumbo hacia la perdición.
Es cierto que el DT sufrió varias dificultades para afrontar el decisivo choque ante los Triperos, ya que entre lesionados y sancionados, Newell’s viajó a la Plata con un plantel muy reducido y repleto de juveniles. Pero es Newell’s hoy: pocas opciones y aún menos recursos.
Bidoglio deberá aprovechar al máximo el parate que se viene por la fecha Fifa para reacomodar las piezas y pensar con suma cuidado lo que resta de la temporada, en la cual la Lepra no solamente estará obligado a sumar lo más que pueda en la Superliga, sino que también hará su estreno en la Copa Argentina, el próximo domingo en Santa Fe ante Villa Mitre de Bahía Blanca, del Federal A.
¿Una buena? La Fiera está listo para volver. El capitán y referente se perdió los tres últimos compromisos por una distensión en el bíceps femoral de la pierna izquierda y el equipo lo sintió como nunca, con un contundente saldo de todas derrotas, una lógica y hasta previsible ante River en Núñez (4-2), una mucho más preocupante frente a Talleres en el Coloso (2-1), en el cual quedó más en evidencia que nunca la falta total de recambio, y por último la del viernes con el Lobo en provincia de Buenos Aires que mostró la peor versión de un Newell’s que sin su jugador estrella no asusta a nadie.
Además, para afrontar los 32avos de final de la Copa y los dos duelos que faltan por Superliga ante Huracán en casa y frente a Banfield en el Florencio Sola, el entrenador también volverá a contar con Jerónimo Cacciabue y Braian Rivero, el doble cinco titular ausente ante Gimnasia por sanción y que debió ser reemplazado de urgencia con dos pibes como Moreno y Requena, dos excelentes proyectos de las inferiores que fueron debieron cargar con la responsabilidad de darle juego a un equipo sin identidad, el cual depende pura y exclusivamente de lo que puedan hacer alguno de sus jugadores más experimentados como Maxi o el Gato Formica. Otra opción no hay.
