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Sin piedad ni códigos: destino fatal para una joven familia

Cristopher Nahuel Albornoz y Florencia Corbalán tenían 21 años y una beba, Adelain Chelsi, que este 30 de marzo iba a cumplir dos años. Los asesinaron en la noche del domingo

Cristopher Nahuel Albornoz y Florencia Corbalán tenían 21 años y una beba, Adelain Chelsi, que este 30 de marzo iba a cumplir dos años. La relación tenía sus idas y vueltas, pero los jóvenes padres mantenían contacto semanal, según contaron allegados, y los vecinos de Empalme Graneros solían verlos paseando en una moto Honda XR. La noche del domingo encontró a la familia junta cuando fue asesinada de varios disparos por Génova y Cabal.

Este domingo por la tardecita, cuando paró de llover, Cristopher y Florencia salieron con Adelain en moto por el barrio. No se sabe si los siguieron o los estaban esperando. Lo cierto es que, según la pesquisa, en la esquina de Génova y Cabal un vehículo, aparentemente un auto, se les puso a la par. Fue cuestión de segundos y no hubo piedad ni códigos. Los disparos –los vecinos por las características de las detonaciones dicen que fue con un arma automática– arrasaron los cuerpos de los tres.

Florencia fue trasladada al hospital Alberdi, donde llegó muerta: los informes preliminares indican que tenía ocho orificios de bala. Adelain fue alcanzada por dos impactos: uno le traspasó un antebrazo y otro, fatal, le dio en la cabeza. La beba llegó con muerte cerebral al hospital de Niños Zona Norte, señaló el jefe del centro de salud.

Cristopher, que es hijo de Miguel Ángel Albornoz, un hombre conocido en Empalme Graneros que la Justicia Federal ligó al comercio de drogas, murió en el Heca. Su cuerpo tenía varios disparos.

El abuelo de Florencia dijo a la prensa: “Para mí fue un ajuste de cuentas contra ellos (por la familia Albornoz)”. Y expuso que la pareja actualmente se encontraba separada, pero mantenían vínculo. “Él estaba muy buscado”, contó el hombre en referencia a Cristopher, aunque no especificó detalles.

Desde anoche los mensajes de despedida y luto en las redes se multiplicaban. Su cuñado, el futbolista Chimi Ávila escribió en redes sociales: «Mi hermano, mi compañero, mi todo, te voy a recordar y llevar toda mi vida en mi corazón. No entiendo esta puta vida. Te fuiste con la mujer que amabas y la Polli el reino de los paraísos vuelen alto mis ángeles. Q.D.E.P te voy a extrañar día a días Bubin te amo Cristopher Nahuel».

Caracú y otro hijo, Gustavo, hablaron en 2017 con El Ciudadano y por aquel entonces aseguraron que no poseían relación con el narcotráfico: “Cada cosa que pasa, aparece el nombre de Caracú”, se quejaron en un descargo por una serie de notas que reproducían información de la justicia federal que los ligaba al regenteo de búnkeres y a un homicidio.

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