En Rosario, Sofía Viola mostrará por primera vez su nueva producción discográfica, lanzada en septiembre de 2018 y que ya giró por España, Chile, Brasil y varias ciudades argentinas. Además repasará todos sus clásicos presentes en sus tres discos precedentes.
De familia de artistas, Viola es cantante, compositora y actriz, y de un ingenio desbordante. Hija del trompetista Pollo Viola y sobrina de Omar, un prócer de las artes independientes que estuvo al frente del teatro Parakultutal de Buenos Aires y fue ícono de la noche porteña en la década de los 80 cuando asomó la democracia, Sofía forjó un estilo arrabalero, rockero, tropical y antiguo.
La figura de Tita Merello la movilizó. La imitaba también en esas veladas en las que le supo poner voz a Shakira, esa de los primeros años, con la que en algún momento se identificó. De más grande escuchó a Violeta Parra. Embebida de esa cultura bohemia se fue animando cada vez a más con canciones que hablan de la vida y los amores en tiempos de urbanidad, desde la simpleza y la acidez.
Creció en el underground del Gran Buenos Aires y la Capital Federal, también en las redes sociales, y compuso más de un centenar de canciones que pasan por muchos ritmos musicales de raíz latina y jazzera.
Trovadora, viajó con su mochila, su guitarra y su charangón buscando experiencias por el mundo. Así pasaron por su cuerpo los boleros, valses, rancheras, cumbias, chacareras y música urbana, y hasta se le anima al pop.
Ahora, tras sus tres experiencias discográficas anteriores (Parmi, Munanakunanchej en el Camino Kurmi y Júbilo) lanzó La huella en el cemento, material producido por Ezequiel Borra y que esta noche sonará por primera vez en Rosario.
La cantautora Sofía Viola presentará oficialmente La huella en el cemento, en un concierto íntimo que tendrá lugar este domingo a partir de las 22, en Casa Brava (Pichincha 120)