En el marco de la reunión que se lleva a cabo desde las 15 en el Ministerio de Trabajo entre representantes de le empresa Sol Líneas Aéreas, gremios y empleados, la firma propuso dejar sin efecto los telegramas de despido de los 300 trabajadores y que estos sean licenciados con goce de sueldo. El encuentro duró más de 4 horas y finalizó con la aceptación de la propuesta, por el término de 15 días.
La propuesta se llevó a cabo ya que la empresa negocia la venta con un inversor privado. Por esto, la firma ofreció vacaciones pagas para todo el personal que hace menos de una semana recibió los telegramas de despido, pero los delegados pidieron como requisito que se los licencie con goce de sueldo.
«Suspendemos por 15 días las medidas de fuerzas previstas a la espera de un resultado positivo para la transferencia de la empresa», detalló el secretario general de APA, Gerardo, Llano, quien precisó que durante ese plazo permanecerá el acampe que los empleados de Sol mantienen en el hall del Aeroparque Metropolitano.
Ese plazo se puso debido a que el problema de fondo, es decir la venta de Sol a otra empresa que se haga cargo de los trabajadores cesanteados y las rutas que operaba, aún no fue resuelto.
Los directivos de Sol «ofrecieron suspensiones y ofrecieron vacaciones pero las rechazamos; se acordó una licencia porque la empresa no está en capacidad de volar», sostuvo el sindicalista a la salida de la reunión en Trabajo.
El conflicto vio la luz el viernes pasado, cuando los 300 empleados de la empresa recibieron telegramas de despido. Algunos se enteraron cuando fueron a trabajar y se encontraron con las puertas de las distintas delegaciones de la firma cerradas.
En horas de la mañana se indicó que representantes del Ministerio de Trabajo negociaron con directivos de Sol un mecanismo para pasar a los trabajadores a otras empresas del sector, y que hay dos empresas que realizan viajes de egresados interesados en hacerse cargo de la compañía.
No habría solución sobre el tema de las rutas que operaba la empresa Sol, que dejó de volar el jueves pasado luego que el gobierno nacional decidiera rescindir un acuerdo de código compartido con Aerolíneas Argentinas.
