Sólo dos de cada diez pagos por cualquier concepto son realizados con mecanismos electrónicos en la Argentina, país que se encuentra por detrás de Brasil y Chile en la tendencia de llevar las transacciones monetarias a la economía digital.
Los pagos electrónicos están por debajo del 20% en promedio en América Latina: en Brasil llega al 30%; Chile, 27%; Argentina, 22%; Colombia, 13%; Perú y México, 12%; y por detrás otros países como Bolivia, Paraguay y Uruguay.
Así lo precisó Gilberto Caldart, presidente para América Latina y el Caribe de MasterCard, al disertar en las Jornadas Monetarias y Bancarias organizadas en el salón Bosch del Banco Central de la República Argentina, donde participaron destacados expertos en dinero electrónico.
«Ya tenemos 15 millones de personas conectadas a billeteras móviles en América Latina. Y la Argentina no es una excepción al avance del dinero electrónico», dijo el banquero y vaticinó que esta tendencia irá creciendo a medida que se mejore la infraestructura pública y del propio sistema financiero.
El vicepresidente de Mercado Libre y CEO de Mercado Pago, Osvaldo Giménez, indicó que el comercio electrónico viene creciendo mucho en la Región pero aún representa sólo el 4% de las transacciones, contra el 10% en los Estados Unidos y el 20% en Corea de Sur, un país que está en la vanguardia.
Ambos empresarios reconocieron que la Región y Argentina en particular son terrenos muy fértiles para el avance del dinero electrónico, principalmente por el arrollador avance de la Generación Y, más conocida como los «Millennials», que actualmente busca pagar sin efectivo desde una entrada de cine hasta un pancho en un kiosko a la calle.
Los Millennials, la población que busca que la tecnología básicamente les resuelva cuestiones cotidianas de la vida, tienen entre tres y cinco aparatos (celulares, tablets, computadoras, smart TV, entre otros) conectados a internet en sus casas y los utilizan para informarse y realizar transacciones comerciales.
«Los consumidores tienen tremendas expectativas por lo que la tecnología puede hacer por ellos, eliminando las fricciones principalmente a la hora de realizar pagos», evaluó Caldart ante la atenta mirada de banqueros en la sala de la autoridad monetaria.
Vaticinó Caldart que en los próximos cinco años el mundo verá más cambios en los medios de pago de lo que ha visto en las últimas cinco décadas y advirtió que América Latina camina hacia una economía digital, en línea con los países más desarrollados del mundo.
