Entre las 11 listas para las próximas Paso del 16 de julio en Santa Fe hay, como en cada elección, para todos los gustos. Están las que representan ambiciones personales –incluso puramente individuales– y no muy lejos de allí, las que no llegan a intentos colectivos pero sí grupales, acaso como los intereses que pudiera tener una secta, o una logia. También están las que denotan interminables negociaciones, tan intensas que dejan visibles ojeras al momento de presentarse, ya que de día se suele esgrimir la amenaza de romper, pero en las madrugadas se contemporiza y se termina cerrando, a veces con pipas de la paz, a veces no: es casi ley que cuando el primer puesto está cerrado, la puja por los siguientes atraviesa hasta la hora final, y aí ocurrió hasta las 23.59 del pasado viernes 12 de mayo. Pero además de los tironeos, entre las, los y les candidatos están también las sorpresas, las que muestran a las claras que hubo una alquimia que haría morir de envidia a los antiguos sabios de la edad media, que nunca hallarían semejantes fórmulas para adherir opuestos; y están también las que denotan una negociación compleja pero pacífica, donde valen los números de las encuestas y el poderío de las organizaciones. Acaso entre éstas están también las nóminas más genuinas, las que representan intereses concretos, así sean de “amplias” mayorías como de “intensas” minorías. Y una de las sorpresas surgió, precisamente, desde este último conjunto: una lista inédita, que no llegó a tiempo en 2019, pero logró despuntar ahora: se denomina Frente Cooperativo Mutual, y es precisamente lo que dice el nombre; todas y todos sus integrantes son refererentes del sector, que está presente en los 19 departamentos de Santa Fe desde tiempos históricos.
“Con el cierre de listas de precandidatos, para los próximos comicios en la provincia de Santa Fe, la economía social ha logrado un consenso importante en el armado de una lista de precandidatos propios para disputar bancas en la Cámara de Diputados. El Tercer Sector, que nuclea organizaciones sociales, cooperativas y mutuales de Santa Fe, buscará tener representación en diputados con la lista Frente Cooperativo Mutual y plantear una agenda legislativa de la economía social”, dice la carta de presentación de la nómina, que compite dentro del peronismo y aliados.
En total, las listas que competirán en el segundo domingo de septiembre son 11; pero el abanico interno es mucho más amplio: lo que a nivel nacional es Juntos por el Cambio, en la provincia se llama Unidos para Cambiar Santa Fe, y esta vez llega con buena parte de lo que fue el Frente Progresista Cívico y Social. Son 7 listas de precandidatos que van desde el macrismo “puro” del PRO y la UCR entremezclados hasta el Partido Socialista, un “frente de frentes” tan amplio que rememora a la Unión Democrática de 1946. A esas siete nóminas de precandidates, se les suman 3 del llamado Frente de la Esperanza; otras 3 de Viva la Libertad; 2 del Frente de Izquierda y los Trabajadores-Unidad, y 2 de un frente Moderado.
A ellas se suman 5 fuerzas políticas con lista única, que son el Frente Amplio por la Soberanía (que reúne a Bases, la fracción del Partido Socialista que rechazó ir al “frente de frentes” con el macrismo y aliados); la “lista abierta” de Igualdad y Participación del ex PS Rubén Giustiniani; la lista de Unite por la Libertad y la Dignidad; la de la Coalición Cívica-ARI de la ahora crítica del pasado gobierno de Cambiemos Elisa Carrió, y un poco conocido frente que se presenta como Escucharte.
En ese variado menú, la lista que más “sublemas” presenta es el Partido Justicialista, en coalición con aliados tradicionales desde los tiempos del primer peronismo y, ahora, con la todavía joven fuerza Ciudad Futura. Hay 9 opciones dentro de Juntos Avancemos, y una de ellas es el Frente Cooperativo Mutual.
Hay banca
Según el sitio oficial de la provincia, en Santa Fe hay más de1.800 cooperativas y 850 mutuales funcionando. A ellas se suman al menos dos centenares de microempresas distribuidas en 63 localidades de los 19 departamentos. Y centenares de emprendimientos familiares y organizaciones comunitarias como comedores y merenderos, clubes de barrio, bibliotecas populares y huertas colectivas que atienden y contienen a las franjas más pobres y excluidas de la población, familias debilitadas por el cóctel de alta inflación, caída del poder adquisitivo y aumento sideral en el precios de los alimentos.
En ese marco horizontalmente solidario, la política, partidaria y de gestión, queda lejos. Como ejemplo, la discutible composición de la Cámara baja en Santa Fe es caprichosa: la lista que obtiene la mitad más uno de los votos se alza con 28 de las 50 bancas, y las restantes 22, condenadas a minoría, se reparten proporcionalmente por el sistema D’Hondt. Siempre se va a cambiar, pero nunca se cambia; originalmente se había acordado así en la última Convención Constituyente, en 1962, para garantizar un sendero de “gobernabilidad”, pensando como obvio que la fuerza que gana las elecciones para la Casa Gris, también lo hace para el Palacio Legislativo. Con gobernadores impedidos de reelegir, pero con alto rating de liderazgo político, se demostró que no funciona así, sin ir más lejos, con la acctual gestión: Omar Perotti tuvo el impulso nacional del Frente de Todos, y el fallecido socialista Miguel Lifschitz encabezó la lista de diputados y tuvo todavía más votos a nivel provincial.
Ahora el panorama para las generales del 10 de septiembre permanece difuso –se comenzará a esclarecer en las Primarias de julio– pero el Frente Cooperativo Mutual cifra esperanzas en acomodar candidatos en lugares expectantes, traccionando después desde el sector los votos para alcanzar la mayoría. No es fácil para un debut: la actual integración del cuerpo se conformó con 28 bancas del entonces Frente Progresista, y los 22 escaños restantes se repartieron entre sólo cinco expresiones políticas, aunque el devenir político hiciera que después se gestaran más bloques y sub-bloques.
Así las cosas, en la lista aparecen, en los primeros lugares reconocidos dirigentes comunitarios. A la cabeza está Oscar Rosas, dirigente mutualista del centro norte provincial, directivo de la Asociación Mutual Club Atlético Pilar, con sede central en Pilar, departamento Las Colonias, y filiales en diferentes localidades de otros departamentos. A Rosas, quien además es secretario de la Federación Santafesina de Entidades Mutualistas “ Brigadier Estanislao López”, lo secunda Gladys Romero, cooperativista de trabajo e inclusión de Reconquista, en el departamento General Obligado. Y tercero está Hugo Eberhardt, cooperativista de servicios públicos (es presidente de la Cooperativa de Agua Potable de San Vicente, en el departamento Castellanos). A ellos se suman «60 dirigentes cooperativistas, mutualistas, emprendedores y trabajadores sociales que han desarrollado a lo largo y ancho de la provincia un gran trabajo territorial, acompañando el desarrollo productivo, económico y social de sus localidades y regiones», dijeron a El Ciudadano desde el sector.
Además de la trayectoria de las y los precandidatos, el Frente puntualiza que quiere llevar al Congreso santafesino dos “propuestas de relevancia para el aporte al desarrollo productivo y económico de la provincia”, y que son, la primera “que la economía social tenga rango ministerial, para acompañar las iniciativas y fortalecer el trabajo de cooperativas de servicios públicos, cooperativas de trabajo y cooperativas de empresas recuperadas en sus comunidades y regiones, como así también acompañar el desarrollo de mutuales que traccionan la productividad y las economías locales”; y, la segunda, una reforma ributaria “para que a través de los recursos que el propio sector genera” se puedan generar puestos de trabajo genuinos y aumentar la producción de bienes y servicios para todos los santafesinos.
Con todo, el Frente Cooperativo Mutual integra la lista del oficialismo provincial; sin embargo, lo hace desde una óptica crítica: sostienen que “ninguna de las gestiones provinciales”, propias o ajenas que pasaron, “ni la actual” tampoco, han sabido comprender al sector de la economía social, “y mucho menos han sabido valorarlo”.