Miguel Lifschitz está tan convencido de que será gobernador que ya alquiló una casa en Santa Fe, en pleno barrio Sur, a pocas cuadras de la Legislatura y de la Casa Gris. Allí, el ex intendente y actual senador provincial recibió a El Ciudadano para una entrevista a fondo sobre la campaña que se viene.
“Hoy ningún partido por sí solo puede garantizar la gobernabilidad”, planteó de entrada Lifschitz en relación a la estrategia de alianzas del socialismo. La semana pasada se conoció el nombre de su compañero de fórmula: el radical Carlos Fascendini, actual ministro de la Producción del gobierno de Antonio Bonfatti. Este miércoles se presentará el resto de la lista, que por estas horas negocian socialistas, radicales y dirigentes de las otras fuerzas del Frente Progresista.
El candidato oficialista y dos veces intendente (entre 2003 y 2011) dice representar “la renovación” del Partido Socialista, que gobierna la provincia desde 2007 y va en busca del tercer mandato consecutivo luego de las gestiones de Hermes Binner y de Bonfatti. “Nuestra propuesta representa lo mejor de la continuidad y lo mejor del cambio”, agregó.
La primera parada de Lifschitz será en las primarias de abril ante el espacio que comparten el radical Mario Barletta, el socialista Rubén Giustiniani y la Coalición Cívica de Pablo Javkin.
El actual senador por el departamento Rosario opinó que el de Fascendini “es el nombre que ha generado mayor consenso por su trayectoria, su experiencia, por su conocimiento del territorio y su vínculo con la dirigencia radical de toda la provincia. Además ha sido un muy buen ministro y ha generado una buena relación con el equipo de gobierno”.
—En los últimos días el senador Giustiniani hizo fuertes críticas por la seguridad…
—Giustiniani hace críticas más duras que si fuera un dirigente opositor. Creo que es un error político de él, primero porque forma parte del espacio político que gobierna la provincia y por lo tanto no puede convertirse en opositor, pero además con esa prédica, lejos de ganar puntos para él o para su sector, lo que está haciendo es arrimarle votos a la oposición: a Del Sel o a algún candidato del peronismo que pueda tener el mismo discurso.
—El año pasado usted decía que el rival era el PJ y no el PRO. ¿Cómo lo ve ahora?
—Dije eso en la perspectiva de que el PJ encontrara un candidato que pudiera representar y contener a sus distintos sectores, pero hasta ahora no lo ha logrado y los plazos se van haciendo cada vez más breves. Pareciera que no lo va a lograr. En tal caso, me parece que va a ser una elección con muchos candidatos que van a disputar el mismo espacio: van a estar Buzzi y Cachi Martínez (Frente Renovador), va a estar Perotti (PJ) y Del Sel (PRO). Son dirigentes con discursos muy parecidos que van a transitar por el mismo andarivel, van a disputar el mismo electorado. Después habrá un voto kirchnerista que irá a Busatto o a Cleri. Y después hay un ancho espacio en el cual pensamos que vamos a contar con un amplio apoyo para el Frente Progresista. Los santafesinos quieren cambios, quieren cosas nuevas, pero también quieren que todo lo bueno que se está haciendo continúe.
—¿En qué se diferencia usted de Binner y Bonfatti?
—Primero, soy de otra generación. Represento una renovación y voy a trabajar con un equipo más joven. Por otro lado, hay ya una experiencia realizada por ellos, lo que me da cierta ventaja ya sea por los aciertos como por las cosas que no funcionaron. Vamos sobre un terreno conocido y esa es una ventaja. Y por otro lado, por mi profesión de ingeniero, yo tengo una visión más ejecutiva, de planificación, control, verificación y evaluación. Soy más ejecutivo.
PROFUNDIZAR EL PLAN ABRE, ENTRE LOS EJES DE CAMPAÑA
Énfasis en la infraestructura
—¿Cuáles serán los ejes de su campaña?
—Nuestra propuesta representa lo mejor de la continuidad y lo mejor del cambio. Vamos a darle continuidad a los ejes de trabajo de los últimos años, a las cosas que la gente ha valorado positivamente, pero también vamos a enfrentar los próximos cuatro años con otra impronta, con nuevas políticas y acciones. Una buena combinación entre continuidad y cambio.
—Puntualmente, ¿qué pretende cambiar?
—Primero, pienso que hay que poner mucho énfasis en la infraestructura. Tenemos algunas carencias en materia de mantenimiento de rutas y caminos rurales, problemas de energía en muchísimos lugares y también hay que mejorar la infraestructura urbana del Gran Santa Fe y del Gran Rosario. En materia social, en las dos grandes ciudades, el Plan Abre ha sido una gran innovación pero hay que profundizarlo y extenderlo a todos los barrios vulnerables de Santa Fe y Rosario. Y, obviamente, la seguridad, que es el tema sobre el cual el gobierno que venga va a tener que encontrar soluciones o estrategias efectivas para lograr cambios.
—¿Cuál es su propuesta en materia de seguridad?
—Primero hay que tener un buen diagnóstico, algo que recién se está construyendo. Hay que conocer muy bien la realidad, tener tipificado el tipo de delito que se produce en cada localidad y en cada barrio, cómo se dan esos fenómenos; cada lugar tiene fenómenos distintos y no se puede tener una política general igual para todos. Hay que tener estrategias específicas y para eso hay que tener muy buena información y manejarla bien. Eso recién ahora se está logrando.