La diputada nacional y titular del GEN, Margarita Stolbizer, confirmó hoy su “distanciamiento» de la Unión Cívica Radical (UCR) a raíz de sus contactos con Francisco de Narváez. Además, pidió «coherencia» a la conducción del centenario partido.
«Las colectoras desnaturalizan el sistema político y lo hemos criticado. Ahora Ángel Rozas, que es el presidente del radicalismo, dijo vamos a usar las colectoras con De Narváez o con Juan Pérez, como quien dice con cualquiera, y la verdad que eso provoca necesariamente un distanciamiento, porque a nosotros cualquiera no nos da lo mismo», se quejó Stolbizer.
La diputada remarcó que «existe una tendencia por parte de muchos candidatos a unirse por conveniencia y no por convicción, con tal de sacar votos», y afirmó que desde su espacio político apuestan a «una posición coherente».
«Creo en los acuerdos de gobernabilidad, creo en la discusión de las políticas de Estado, pero no pensemos que eso puede terminar en una única opción electoral. Haríamos mucho daño al funcionamiento del sistema político si le entregáramos al oficialismo la bandera del progresismo, que fueron bastardeadas en la gestión», advirtió Stolbizer.
En este sentido, insistió en que en octubre «debe haber una coalición política de centroderecha», donde ubicó a Mauricio Macri, Eduardo Duhalde y a De Narváez, «y una coalición política de centroizquierda» a la que debería pertenecer el radicalismo, el socialismo y el GEN.
«En el medio existe esta franja sin ideología que es la política de los negocios, donde está el oficialismo, al que hay que tratar de ir limando de un lado y del otro para que el sistema político recupere un debate de ideas», opinó en declaraciones radiales.
Sin embargo, Stolbizer consideró que el panorama electoral «no está definido» y se aventuró a deslizar la posibilidad de que la presidenta Cristina Kirchner «no sea candidata».
Por su parte, el diputado nacional por el GEN Gerardo Milman dijo que «es muy probable que el radicalismo insista con un acuerdo con el peronismo, similar al que hicieron con Duhalde y Lavagna en el 2009, pero finalmente el electorado se aleja de estas propuestas como en aquel entonces, que los ubico en el tercer lugar».
«En política nunca dos más dos es cuatro y esta no será la excepción. Espero que el radicalismo resista la ofensiva del pragmatismo y se pueda conformar una oferta electoral consistente», concluyó.
