Es ley la actualización del Código Fiscal provincial que incluye un aumento del impuesto Inmobiliario Urbano y Rural y una rebaja de Ingresos Brutos. La Cámara de Diputados le dio sanción definitiva, este jueves, al proyecto remitido por el Ejecutivo en conjunto con el presupuesto 2019.
Así, a partir de 2019 el impuesto Inmobiliario Urbano aumentará en promedio un 27,8%, y el Inmobiliario Rural tendrá un incremento general en las partidas del 31,5%. Los propietarios de pequeñas partidas inmobiliarias que no superen las 50 hectáreas y que se dediquen a explotarlas en forma personal podrán solicitar una reducción adicional del 10% de ese impuesto.
En línea con el Consenso Fiscal de 2017, el impuesto sobre los Ingresos Brutos correspondiente a las actividades industriales bajará del 2% al 1,5%. Se mantiene la exención para los contribuyentes que no superen los 64 millones de pesos de facturación anual. Y se establece, para las actividades primarias, una disminución de la alícuota del 1% al 0,75%.
Se mantiene la vigencia del Régimen Simplificado de Ingresos Brutos, que implica beneficios para más de 125 mil pequeños contribuyentes. Para evitar los efectos de la inflación, se incrementará en un 30% el monto anual de facturación que constituye el máximo admisible para adherir al Régimen Simplificado.
A diferencia de la nueva ley tributaria, quedó cajoneado en el Senado el proyecto que propone modificaciones impositivas para ampliar el Fondo Compensador del Transporte Público. Con esa iniciativa se buscaba aumentar la carga tributaria a bancos, financieras y cerealeras para compensar con esos recursos la quita de subsidios de la Nación, pero los senadores no avanzaron sobre el tema a pesar de que el Ejecutivo lo incluyó para el período extraordinario.