Terminado uno de los grandes dolores de cabeza para el Ejecutivo municipal –pero sobre todo para el oficialismo en el Concejo– con la aprobación del presupuesto 2015 y la modificación de la ordenanza tributaria con los nuevos valores para la Tasa General de Inmuebles y el Derecho de Registro e Inspección que tributan los comercios tanto desde el sector de la oposición que no acompañó los proyectos como desde el entramado que logró su aprobación salieron a defender sus posiciones. Y en ese marco uno de los argumentos centrales de la posición mayoritaria, que se tradujo en 15 votos para la ordenanza y en 16 para el presupuesto municipal –es decir que estuvo a un tris de los dos tercios de los 24 ediles en el primer caso y de exactamente esa mayoría calificada en el segundo– fue el carácter “progresivo” de las modificaciones tributarias sobre las que finalmente se articuló el consenso. Es que mientras los vecinos de la ciudad recibirán un aumento sensiblemente menor en la TGI a lo estipulado en el proyecto original, en contrapartida los grandes ganadores económicos del año, como las empresas de telefonía celular, tributarán mayores alícuotas por Drei: en el caso de estas últimas, el aumento será del 40,5 por ciento
La suba en la TGI originalmente propuesta por el Ejecutivo –y como herramienta de negociación sostenida casi hasta último momento por la secretaria de Hacienda, Verónica Irízar– establecía aumentos acumulativos en cada trimestre de 2015, que arrancaban en el primero con un 43 por ciento de suba, y se distribuían en los otros tres con un 15 por ciento en cada uno. La cuenta redundaba en un 78 por ciento en promedio para todo el año. Pero a la hora de recibir las boletas, el importe a pagar a partir de octubre de 2015, por ejemplo, iba a ser de más del doble –exactamente un 115 por ciento– que el que los contribuyentes abonaron en octubre de este año.
Incontables tironeos fueron troquelando ese reajuste hasta reducirlo a apenas poco más de la tercera parte. De un 78 por ciento en promedio se pasó a un 29 por ciento “plano” para todo el año próximo, de modo tal que los vecinos recibirán en diciembre de 2015 una boleta con el mismo valor que, por ejemplo, en abril de 2015. Y sólo por un detalle “técnico” (ver aparte) no se puede decir que ya desde enero próximo.
La carga más liviana que tendrán los contribuyentes en la TGI será equilibrada con una suba del tributo empresario, el Drei, para la que también el acuerdo de los ediles aplicó el mismo principio “progresivo”: no subirán las alícuotas para los pequeños comerciantes pero sí para los sectores que sin lugar a dudas estuvieron en el podio de los ganadores pese a los vaivenes económicos del año.
En esa lista se incluyeron a los comercios de mayor superficie como súper e hipermercados, y a los bancos y entidades financieras, además de las telefónicas.
Del 9,45 al 11,34 por mil –un aumento del 20 por ciento– es lo que pasarán a tributar los “establecimientos de comercialización de artículos comestibles, del hogar, e indumentaria” de más de 1.200 metros cuadrados “con casa central en la ciudad”. Y una suba del 15,75 al 19,70 por mil se aplicará para el mismo tipo de comercios, con la misma superficie, pero con casa central fuera de Rosario: para estos el reajuste será del 25 por ciento.
El sacudón porcentual más fuerte es para la telefonía celular y móvil, que pasará de tributar un 12,60 por mil este año a un 17,70 en 2015. Esto es lo que representa un 40,5 por ciento de suba.
A la inversa, el menor porcentual lo tendrán, finalmente, los que más están tributando en la actualidad, y con grandes sumas, que son los bancos y entidades financieras. Pasarán del 22,05 por mil al 23,50, un aumento apenas centésimas menor a un 6,6 por ciento.
Con todo, con un aumento en la TGI para todos los radios por igual y una suba en Drei específicamente para algunos sectores, se estima oficialmente un aumento en la recaudación de 140 millones de pesos para la Tasa y de aproximadamente 69 millones de pesos para el Derecho de Registro, solventando un presupuesto 2015 que se calculó en casi 7.186 millones de pesos, un 49 por ciento más que las cifras calculadas para este año en la ordenanza madre de la gestión municipal.
Asoma la reforma
La idea de algunos de los concejales que acompañaron al oficialismo constituyendo mayoría es la de encarar una “profunda” modificación a la ordenanza general impositiva. Uno de los ejes es que a los “radios tributarios” se le agregará también la variable de servicios. “No pueden tributar de la misma forma quien tiene pavimento definitivo, quien tiene mejorado o quien está frente a una calle de tierra”, explicó un concejal.
Aumento en marzo y en una boleta aparte
El aumento del 29 por ciento “plano” para todos los contribuyentes en la Tasa General de Inmuebles no correrá a partir de enero de 2015 por un problema “técnico”: las boletas para distribuir en ambos meses ya fueron impresas y están al mismo valor que hoy. La diferencia de los dos meses con el valor llegará en una boleta extra junto a la de marzo, por lo que los contribuyentes abonarán en el tercer mes del año próximo la TGI con el aumento más una “media” TGI, con un saldo a abonar del 58 por ciento del valor que los vecinos pagaron este mes.
El presupuesto 2015 y las modificaciones a la ordenanza general impositiva recién alcanzaron consenso y a probación anteanoche, en un plazo demasiado próximo a la fecha de pago de las próximas boletas. Son cientos de miles, que deben ser distribuidas en toda la ciudad, por lo que el Ejecutivo no tuvo otro remedio que imprimirlas con los mismos valores de diciembre.
Similar situación ocurrió el año pasado y se resolvió de la misma forma, con la impresión de una boleta número 13 que llegó a los vecinos por separado de la de marzo, y durante el transcurso de ese mes. Así, el aumento en la Tasa General de Inmuebles previsto comenzará a operar en marzo, y a partir de abril llegarán las boletas con el que mantendrán hasta diciembre de 2015.