A pocos días de comenzar a disputarse los octavos de final del Mundial Femenino de Fútbol de Australia/Nueva Zelanda, la Fifa anunció que la novena edición de la Copa del Mundo ya es un récord.
Durante la primera etapa, la de la fase de grupos, se vendieron 1.715.000 entradas.
Además, China produjo la audiencia más alta para un solo partido en cualquier parte del mundo: 53,9 millones de espectadores vieron su partido contra Inglaterra.
El primer partido de la fase de grupos de Colombia triplicó la audiencia televisiva más alta de la anterior Copa Mundial Femenina de la FIFA (2,84 millones) e incluso eclipsó todas las audiencias de la Copa Mundial de la FIFA Qatar 2022, excepto la Final.
El tráfico en las plataformas digitales de la FIFA en los primeros 15 días ya ha superado la totalidad de Francia 2019.
Al final de la fase de grupos, se han batido récords en áreas tan diversas como la venta de entradas, las cifras de transmisión y los datos de los medios digitales.
En la cancha, países de todos los continentes están escribiendo su propia historia. Por primera vez, equipos de las seis Confederaciones ganaron un partido en el torneo. Nueva Zelanda se convirtió en el primer equipo de Oceanía en registrar una victoria, mientras que Filipinas, Zambia, Portugal, Jamaica, Sudáfrica y Marruecos también obtuvieron su primera victoria.
Los representantes de África están batiendo todo tipo de récords. Tres equipos han llegado a los octavos de final. Nigeria se convirtió en la primera nación africana en completar su grupo invicto, mientras que Marruecos es el primer equipo africano en ganar dos partidos consecutivos y mantener la portería a cero en partidos consecutivos.
En Nueva Zelanda, casa de la Selección Argentina durante tres semanas, el récord de público para un partido de fútbol en el país (femenino o masculino) se rompió dos veces en 12 días, primero en el partido inaugural y luego cuando 42.958 fanáticos vieron a Portugal enfrentarse a Estados Unidos. En Australia, el torneo también estableció un récord para un partido de fútbol femenino independiente, cuando 75.784 aficionados asistieron al primer partido de Australia contra la República de Irlanda.
El torneo en múltiples sedes ha contado con el apoyo de 5000 voluntarios que han dado vida la novena edición del certamen mundialista, duplicando el número de voluntarios en 2019. La gran mayoría de los voluntarios son de los dos países coanfitriones, mientras que alrededor de 5 porciento de los voluntarios viajaron desde sesenta y ocho países diferentes, en representación de las seis confederaciones de la FIFA.