En los últimos días comenzó a funcionar el módulo de producción lechera en la Facultad de Ciencias Agrarias en la localidad de Zavalla, un tambo de alta tecnología que produce un promedio de6.500 litrosde leche por día. Del acto inaugural participaron las autoridades de la casa de estudios, el subsecretario de Lechería de la Nación, Arturo Videla, y el ministro de la Producción de la provincia, Juan José Bertero. Dentro de las507 hectáreasque ocupa el predio dela Facultad, hay 140 vacas, y “cada una de ellas cuenta con un chip o transporter que permite leer información al momento del ordeñe” desde una computadora que detecta cada caso. Entonces, si uno de los animales está bajo algún tipo de tratamiento con antibiótico y no debe ser ordeñado, “la máquina se para”, describió Cecilia Vigna, asistente técnica y docente de Administración Rural.
La alta tecnología aplicada en el tambo permite además saber cuántos litros de leche da cada animal. “Todo queda registrado en un programa diseñado para conocer la información de cada vaca”, agregó. El campo experimental de Zavalla cuenta además con un módulo agrícola, porcino, monte frutal, cría de invernada y quinta hortícola con dirección técnica de docentes dela Universidad. JulioGalli es el responsable del establecimiento, con un tambero a cargo, y simultáneamente ordeña a 24 vacas, que da un promedio diario de26 litroscada una, con dos extracciones diarias.
“Las vacas están en el corral de espera, ingresan por una manga y una computadora lee el chip; entonces el sistema identifica si por ejemplo la vaca está con algún tratamiento. Incluso, se establece una curva de la alimentación en base al momento de la lactancia, al tipo de animal, a la producción que tenga y se le suministra la cantidad de alimentos para esa información, mientras es ordeñada”, explicó Vigna.
Una usina de San Genaro compra la producción que es de unos3.700 litrospor día. “La leche se deposita en un tanque que la mantiene a una temperatura de 4 grados, ya que es obligación entregarla fría”, señaló la docente, quien destacó que los ingresos por la venta de la producción vuelven a invertirse en el predio.
El litro de leche se lo pagan 1,45 peso, lo que motiva el desaliento en la producción y provocó que muchos productores lácteos se hayan pasado a la explotación de soja en sus campos.
Al respecto, Vigna apuntó: “Nosotros hacemos una gestión que es retroalimentar las decisiones, porque la producción lechera es compleja en cuanto a las variables que intervienen, el cuidado que cada animal requiere, como vacunas y alimentación. El tambo tiene una estructura de capital mayor, y el resultado debe ser grande para obtener una renta razonable, para que lo aliente a uno a seguir en la actividad. Los sistemas agrícolas son modelos más simples, ya que requieren menor dedicación y tiempo”.