La integrante de la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Taty Almeida, afirmó que ellas siguen “de pie a pesar de las sillas de ruedas, los bastones y los carritos por la alegría y el cariño” que reciben, al referirse a la marcha que ayer convocó a una multitud para recordar el golpe de Estado en la Plaza de Mayo.
Para Almeida, el acto conmemorativo por el 40 aniversario del golpe cívico-militar permite a los integrantes mayores de organismos de Derechos Humanos “sacar fuerzas” y admitió que se sintió “emocionada y conmovida” por la cantidad de jóvenes militantes que formaron parte de la movilización.
La dirigente afirmó además que éste 24 de marzo fue “especial” por cumplirse 40 años de la llegada de las fuerzas armadas al poder, pero que también actuó como “incentivo ante la injusticia por los 100 días de gobierno” del presidente Mauricio Macri.
Recordó el documento leído ayer en la Plaza firmado por Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo línea fundadora, H.I.J.O.S. y Familiares de Detenidos Desaparecidos, que bajo la consigna “Sin derechos no hay democracia” cuestionó varias medidas tomadas por el gobierno.
“Con democracia no se reprime, no se despide ni se encarcela a militantes políticos”, dijo al referirse a la dirigente de la agrupación Tupac Amaru, Milagro Sala.
Almeida destacó el esfuerzo que hicieron integrantes de la organización para estar presentes ayer, pese a su estado de salud, como la presidenta de Madres Línea Fundadora, Marta Vásquez y Carmen Lapacó.
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