Después de semanas de idas y vueltas, el Concejo Municipal aprobó ayer la renovación por diez años del derecho de explotación de 465 chapas de taxis. Los ediles acordaron prorrogar las licencias por un costo de 130 mil pesos cada una. Podrá ser abonado en 48 cuotas sin interés a partir del marzo del año que viene. Los autos deberán tener un máximo de cinco años de antigüedad, inclusive el modelo Chevrolet Corsa. Para renovar, los titulares no podrán tener más de 15 multas graves. Las chapas en debate corresponden a las 500 que entraron en circulación en 2007 de manera excepcional y que vencían en noviembre. Las 35 que quedaron afuera serán sorteadas.
El acuerdo fue alcanzado ayer pasado el mediodía en la Comisión de Servicios Públicos y votado por la tarde en el recinto. El proyecto contó con el visto bueno de los concejales de todos los bloques menos el de Ciudad Futura –que pidió un debate más amplio– y la edil del Frente Social y Popular, Celeste Lepratti.
La renovación de los derechos de explotación que estuvieron en debate en las últimas semanas corresponde a las 500 chapas de titulares de taxis que fueron autorizadas en 2007 por única vez y de manera excepcional. De ese total, ayer fueron prorrogadas 465 por una nueva década. Las 35 restantes había sido dado de baja con anterioridad. Serán sorteadas entre peones de taxi, discapacitados, propietarios conductores y propietarios que no conduzcan en distintas proporciones.
Según informaron desde el Palacio Vasallo, el derecho de explotación tendrá un costo de 130 mil pesos que podrá pagarse en 48 cuotas sin interés a partir de marzo del año que viene. Rige para los vehículos con un máximo de cinco años de antigüedad. Aquellos anteriores a 2012 podrán renovar el auto en un plazo de 180 días.
El proyecto votado incluyó al modelo Chevrolet Corsa. El auto que en breve dejará de ser fabricado en Argentina, no cumplía con los parámetros de comodidad que el ejecutivo pretendía para el servicio público de la ciudad. Durante las semanas que duró el debate, los taxistas se opusieron a la exclusión. Argumentaban que había titulares con vehículos de menos de tres años que todavía estaban pagando en cuotas. Finalmente, los concejales acordaron que entre en la misma categoría que el resto de los modelos.
A diferencia de las licencias aprobadas en 2007, las de este año podrán ser transferidas. Este punto fue el único que generó el voto en contra del radical de Cambiemos Jorge Boasso. El edil sostuvo que la transferencia hacía del servicio público un comercio.
Por último, no podrán renovar los titulares que tengan más de 15 multas graves sancionadas por el tribunal de faltas. Entre ellas está pasar el semáforo en rojo, manejar en contramano y dar positivo en los test de alcoholemia o narcolemia.