Las cámaras que nuclean a los titulares y peones de taxis anunciaron un paro en el servicio de transporte para toda la jornada de mañana, el cual se extenderá al lunes, martes y miércoles en horario nocturno. Además, los referentes del sector mencionaron que planean movilizarse el jueves al Concejo con la idea de montar una “guardia” hasta que se termine de tratar el costo de la tarifa en la sesión. La medida de fuerza se anuncia luego de que anteayer no se lograra el quórum requerido en el recinto para tratar el aumento del 30 por ciento.
La falta de acuerdo entre los concejales para debatir el pedido de incremento replicó fuerte en el seno del sector, cuyos referentes se reunieron bien temprano en la mañana de ayer para definir los pasos a seguir.
Tras ese encuentro, ya pasado el mediodía, se anunció la medida de fuerza.
El aumento del 30 por ciento en la tarifa de taxis se había destrabado el pasado lunes en la Comisión de Servicios Públicos y se descontaba que este jueves se aprobaría en el recinto.
Sin embargo, la negociación entre los bloques por el boleto de transporte urbano (ver parte) complicó la jornada y finalmente no se logró quórum para abrir la sesión. Y por ende no hubo votación alguna.
Al no tratarse ayer el proyecto perdió vigencia. Así, ahora el trámite ordinario sería que la comisión volviera a firmar un dictamen el lunes (algo que, se descuenta, sucederá), para que pueda llegar al recinto el jueves próximo.
Según anunciaron tanto titulares como choferes, el paro en el servicio se llevará adelante los siguientes días: el domingo 1º de mayo (feriado del Día del Trabajador) a partir de las 6 de la madrugada hasta el lunes a la misma hora. Luego, lunes, martes y miércoles en el horario de 23 a 6. Y el jueves desde las 12 hasta que se termine de debatir en el Concejo Municipal el aumento, lo que podría estirarse hasta entrada la noche.
Como sea, la postergación del incremento generó un fuerte malestar entre los “tacheros”.
José Iantosca, tesorero de la Cámara de Titulares de Licencias (Catiltar), dijo que el sector “hará sentir el enojo”.
“No puede ser que por cuestiones políticas e internas de los concejales paguemos los trabajadores. ¿Qué tenemos que ver nosotros?”, se quejó.
En tanto, el titular del Sindicato de Peones de Taxis, Horacio Boix, indicó que “los concejales podrían haber aceptado o tratado el tema de incremento de la tarifa de taxis y seguir discutiendo el boleto”.
“Si hubiesen hecho eso nosotros nos íbamos tranquilos y conformes porque hace dos semanas que estamos esperando el aumento”, agregó.
El dirigente afirmó luego que el sector “está en el medio del sándwich y pagando los platos rotos sin tener nada que ver”.
“Es en repudio a este accionar de los concejales que hemos decidido esta medida de fuerza y quite de colaboración. El jueves invitamos a los compañeros a la sesión del Concejo donde esperamos se destrabe todo esto”, arengó.
Con la suba de taxis que se acordó en comisión la bajada de bandera pasaría de 17 a 22 pesos en horario diurno y la ficha o minuto de espera (hoy en 85 centavos) se iría a 1,10 peso.
En horario nocturno, en tanto, el costo inicial subirá de 19,50 pesos a 25 y la ficha se incrementará de 1 peso a 1,30.
Por su parte, en el caso de los remises, la bajada de bandera aumentará de 26,70 a 29,50 pesos, un incremento que se ubica apenas por encima del 10 por ciento. Mientras que la ficha pasará de 1,05 peso a 1,35. Y el minuto de espera sumará otros 2 pesos.
Desde el municipio consideran que la actualización de tarifa tanto de taxis como de remises es razonable si se tiene en cuenta que el último estudio de costos del Ente de la Movilidad arrojó un atraso del 65 por ciento. La idea es aplicar una suba desdoblada con un segundo ajuste más cerca de fin de año.
A diferencia del escenario que se planteó con el boleto de colectivo (donde el acuerdo es con el PRO), los ediles opositores que están dispuestos a aprobar el incremento de taxis son los que se referencian en el kirchnerismo.
Para el titular del bloque justicialista, Eduardo Toniolli, el ajuste del 30 por ciento es aceptable porque “el taxista, al igual que el peón del taxi, depende de la recaudación diaria, que está atada a la tarifa”.
Boletos: los cruces siguieron
Tras la jornada del jueves en el Palacio Vasallo en la que entrada la noche se cayó la sesión, ayer los cruces mediáticos entre algunos concejales y funcionarios municipales no cesaron.
El jueves el Frente Progresista había acordado con el PRO el ajuste en los colectivos, pero le faltó un voto para conseguir quórum. El resto de la oposición reclamó sacar del orden del día ese tema y discutir los otros. Ante el rechazo oficialista, los ediles no sesionaron.
Los concejales macristas se mostraron proclives a aumentar la tarifa del transporte luego de que el Frente Progresista cediera a un ajuste menor para lo inmediato (8 pesos), con un adicional en julio (50 centavos) y el planteo de una serie de exigencias al Ejecutivo.
En ese marco, los reproches cruzados continuaron durante toda la jornada.
El secretario de Gobierno municipal, Gustavo Leone, sostuvo: “No dar quórum es como mínimo irresponsable. Hemos acordado en reuniones con funcionarios nacionales un aporte real en relación a los subsidios para el transporte. Lo propio hizo la intendenta con el gobernador Lifschitz, quien aportó cien millones de pesos para comprar equipamiento para nuestro sistema de colectivos. Y el debate local, que tiene que ver con el boleto, no se da porque los concejales no dan quórum”, señaló el funcionario.
“Había que tratar el jueves este tema porque la semana próxima se deben pagar sueldos en el sistema de transporte y también a los peones de taxis. Esta situación tenía una necesidad temporal. Por eso nos preocupa tanto la actitud”, agregó. Horacio Ghirardi, del PS, dijo que se produjo un extraño pacto entre antiguos concejales y otros que dicen representar la nueva política (en referencia al radical /Pro Jorge Boasso y a Giros).
En tanto, el radical Jorge Boasso, quien no bajó a dar quórum, dijo que decidió no ir al recinto “para que no aumente el boleto en un monto que ninguno de los catorce de los convidados de piedra pretendían ni querían”. “¿Por qué digo convidados de piedra? Porque este aumento fue producto de una negociación bilateral entre el socialismo y el PRO entre bambalinas”, señaló.
REUNIÓN DE ÚLTIMA
Según trascendió ayer por la tarde, este viernes los jefes de todos los bloques políticos del Palacio Vasallo se reunieron en Labor Parlamentaria para volver a negociar e intentar encontrar una salida a la falta de acuerdos. Sin embargo, una vez más no hubo acercamientos. De acuerdo a lo que pudo saber este medio, la oposición planteó al oficialismo la posibilidad de votar ayer mismo sólo el aumento del 30 por ciento en la tarifa de taxis y así evitar la medida de fuerza. Pero desde el socialismo reclamaron sumar el tema de los colectivos, algo a los que el resto de los bloques no accedió.