Un intenso temporal de lluvia, viento y granizo que entre la última noche de 2023 y la madrugada del primer día de 2024 azotó la capital de Córdoba y localidades del interior provincial no dejó víctimas pero sí evacuados, corte de los servicios de electricidad y agua potable y el desmoronamiento del piso en una obra en construcción de la capital mediterránea, donde en apenas tres horas cayeron 60 milímetros de agua.
Fuentes de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil de Córdoba señalaron que el fuerte temporal afectó el sur provincial. Las localidades de Alta Gracia y Anisacate, en el departamento San Martín del Valle de Paravachasca, fueron las más damnificadas por el anegamiento de viviendas que obligó a la evacuación preventiva de unas 20 personas, caída de árboles y postes de red de tendido eléctrico.
Debido a las crecidas de los ríos Anisacate y Segundo se interrumpió el servicio de agua potable de red. Personal de Bomberos y especialistas de las brigadas de Defensa Civil trabajaron para recuperar progresivamente la normalidad, informaron voceros de los organismos involucrados en las tareas.
En la ciudad de Córdoba, el municipio puso en marcha un operativo para recuperar el servicio de luz en varios barrios que fueron causados por la caída de postes de electricidad. Por lo mismo, resultó interrumpido el funcionamiento de semáforos. La crecida del río Suquía causó el ingreso de agua a numerosas viviendas, y varios vehículos quedaron varados por el anegamiento en las calles.
La situación fue similar en las localidades de La Calera y Villa Allende, en las sierras chicas de Gran Córdoba.
En localidades de los departamentos de Juárez Celman y Río Cuarto el temporal fue de mayor intensidad por la caída de granizo, según el informe preliminar del relevamiento que realizan desde la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil.
Una de las consecuencias más impactantes del fenómeno se dio en la capital provincial, con el hundimiento de más de 30 metros de la avenida Vélez Sarsfield cerca del cruce con calle Ángelo de Peredo. Fue al lado del pozo de una obra en construcción para un complejo habitacional.
Se formó un socavón que colapsó el asfalto de un carril, lo que obligó a la intervención de personal de la Municipalidad, la empresa constructora y Aguas Cordobesas.
