La Justicia provincial condenó a once años de prisión a un abogado que el año pasado casi mata a golpes a su ex pareja en la localidad norteña de Villa Ocampo, acción que no concretó sólo por la intervención de los vecinos, que rescataron a la víctima. La joven –quien había decidido cortar la relación y mudarse con su madre 25 días antes del ataque– sufrió graves secuelas físicas y psíquicas y sólo pudo reintegrarse a sus actividades casi tres meses después del hecho, destaca el fallo de Cámara, que resolvió ratificar la pena impuesta por un tribunal de la localidad de Las Toscas por la tentativa de femicidio. En medio del proceso, el letrado intentó apartar de la causa al fiscal instructor, pero su estrategia dilatoria recibió un revés al ser desestimada una denuncia por la Justicia. El penado tenía antecedentes por hechos similares, mientras que la víctima fue acompañada por pedidos de justicia que llevaron adelante organizaciones de género. Según medios de Reconquista, el condenado está en libertad con restricciones, entre ellas no pisar la localidad de Villa Ocampo.
“Yo estaba hace unos 25 días en la casa de mi mamá porque corté una relación que venía de mal en peor con Mariano y parece que él no quería asumir que era definitiva. El domingo a eso de las 10 de la mañana me encontraba sola en la casa y golpean la puerta. Abro y era Mariano, que me empuja, tranca la puerta desde adentro y comienza a pegarme puñetazos en la cara y los brazos, hasta que caí. Traté de detenerlo pidiéndole que hablemos, pero se puso peor: me pateaba por todo el cuerpo, en la cabeza, los brazos, las piernas, mi arrancó mechones de cabello. Creí que me mataba. Grité pidiendo auxilio y algún vecino llamó a la Policía. Cuando él se escapaba justo llegaron en un patrullero y se lo llevaron”. El relato lo hizo ante el vespertino El Litoral Luciana Casali, de 27 años, días después de ser atacada por su ex pareja, el abogado Mariano Vouilloz.
Según reconstruyó la Justicia, el letrado de 45 años tenía antecedentes por hechos similares cuando cometió el ataque, el 17 de enero del año pasado, en una casa del barrio Fonavi de Villa Ocampo, departamento General Obligado. “La víctima sufrió durante el lapso de 40 a 60 minutos golpes de puño y patadas por parte del imputado, quien incluso trató de asfixiarla”, según describió la acusación y avalaron los jueces.
Según el fiscal Norberto Ríos –a quien Vouilloz intentó separar del cargo acusándolo de privación de libertad, incumplimiento de deberes y apremios ilegales– en el juicio llevado adelante en marzo pasado en Las Toscas quedó comprobado que “la reacción de los vecinos permitió el cese de la acción tendiente a matar a la mujer”. En tal sentido, agregó que “no logró concretar su cometido por circunstancias ajenas a su voluntad”.
“La víctima estuvo 80 días sin poder reintegrarse a su vida social y laboral. También debió iniciar un tratamiento psicológico que continúa en la actualidad a raíz de la violencia inusitada con la que fue agredida y el temor que le produjo el ataque”, destacó el fiscal.
Según se informó ayer, los camaristas Carlos Renna, Bruno Netri y Oscar Burtnik confirmaron el fallo en el que se condenó a 11 años de prisión de cumplimiento efectivo a Vouilloz por tentativa de homicidio doblemente calificado, por la relación de pareja preexistente entre la víctima y el victimario y por ser cometido por un hombre a una mujer con violencia de género. En tanto, el tribunal lo absolvió por los delitos de violación de domicilio y amenazas, los cuales también le habían sido atribuidos por el fiscal Ríos.
El caso conmocionó al norte provincial y la víctima fue acompañada por el Grupo Mujeres en Movimiento, que realizó manifestaciones en pedido de justicia.