Peritos informáticos lograron este viernes descargar 4,1 gigabytes de información del iPad de Natacha Jaitt, la modelo que murió hace un año en la localidad bonaerense de Benavídez, en los laboratorios de Gendarmería Nacional y con la ayuda de una empresa de software especializada, informaron fuentes judiciales.
Si bien en febrero se hicieron dos intentos con expertos de la Policía Judicial de la Procuración General bonaerense que habían fracasado, esta vez los fiscales de la causa lograron que se extraiga «parte de la información contenida en el dispositivo», según aclararon los investigadores.
Fuentes judiciales precisaron a Télam que se trata de «4,1 gigabytes comprimidos», mientras que el abogado querellante Alejandro Cipolla, quien representa a la hija de Jaitt en la causa, dijo que son «casi 20.000 fotos y 370 videos».
Ambos informantes aclararon que aún no se pudo ver nada del material que quedó almacenado en DVD encriptados que serán analizados a partir de la semana que viene por la Fiscalía.
«Hay mucha información. Fotos, videos y ubicaciones de mapas, ahora hay que analizarla», dijo a Télam uno de los voceros.
Pese a que se pudo descargar información, los peritos aún no lograron desbloquear la clave ID del iPad, por lo que se continuará trabajando para descubrirla y en ese caso ver si hay más datos de los que hoy se pudieron extraer.
La fuente judicial consultada también aclaró que en la tablet «no hay mensajes de texto o audio de Whatsapp porque el iPad no tenía instalada la tarjeta SIM necesaria para que funcione esa aplicación».
El peritaje se hizo desde la mañana de este viernes en el Edificio Centinela de Gendarmería, en el barrio porteño de Retiro, con ayuda de la empresa Cellebrite Inc.
Se trata de la compañía especializada y creadora del software que utilizan distintos laboratorios técnico forenses en el país y el exterior para extraer la información de celulares y también de este tipo de dispositivos.
Desde agosto del año pasado que la Fiscalía, con la colaboración de la Secretaría de Política Criminal de la Procuración bonaerense, inició un vínculo directo con la compañía para que colabore en la apertura de este iPad, modelo «a1070» de la firma Apple.
Durante el peritaje estuvieron presentes dos de los fiscales a cargo de la causa, Cosme Iribarren y Sebastián Fitipaldi, y el abogado Cipolla en representación del particular damnificado.
La apertura del iPad de Jaitt era la última medida que quedaba pendiente en una causa en la que la querella pidió que se investigue como un posible homicidio, pero que para los fiscales lo más probable es que tenga destino de archivo.
Según fuentes judiciales, a partir de los testimonios reunidos y los videos de las cámaras de seguridad del salón de eventos donde ocurrió todo, los fiscales creen que esa noche la tablet nunca salió de la mochila de la modelo.
Si bien los fiscales lograron en su momento acceder al celular marca Samsung de Jaitt, el iPad no se pudo desbloquear porque nunca se tuvo la clave correcta, y porque el sistema, como todos los dispositivos de la marca Apple, es difícil de vulnerar.
En febrero, el abogado Cipolla, había solicitado que la tablet sea peritada por los mismos especialistas marplatenses de la Policía Federal que lograron ingresar a los celulares de los rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, aunque los fiscales eligieron otros especialistas.
Jaitt (41) murió la madrugada del 23 de febrero del año pasado en el salón de fiestas Xanadú, situado en Isla Verde al 600, de Villa La Ñata, Benavídez, partido de Tigre, al que había concurrido por una reunión de negocios para programar un evento.
En un momento de la noche, durante la cual se consumieron drogas y alcohol, la conductora y modelo sufrió una «insuficiencia respiratoria por edema agudo de pulmón» y una «falla multiorgánica», y murió, según los resultados de la autopsia.
Las pericias toxicológicas confirmaron que Jaitt consumió cocaína y alcohol antes de morir en el salón de fiestas Xanadú, y no detectaron la presencia de ningún veneno.
La familia Jaitt siempre sospechó y planteó que la muerte de Natalia podía haber sido un homicidio, aunque para los fiscales de Tigre todo indica que fue producto del deteriorado estado de salud que presentaba y de la ingesta voluntaria que esa noche hizo de cocaína.
Agencia Télam