Una vivienda que estaba acondicionada para comercialización de drogas en barrio Tablada fue demolida en la mañana de ayer por personal de la Secretaría de Seguridad Comunitaria provincial. El lugar había sido denunciado en varias oportunidades por vecinos y hace 10 días, durante un allanamiento, se había incautado una ametralladora. La construcción derribada ayer estuvo custodiada desde el momento del hallazgo del arma de guerra para que no sea ocupada ni se vendieran estupefacientes, indicaron fuentes del caso.
El operativo comenzó minutos después de las 9 de ayer, cuando personal de Seguridad Comunitaria, custodiado por policías de la Unidad Regional II, llegó hasta la esquina de Colón y Ameghino. Algunos portando picos, mazas y palas, caminaron por calle Colón hasta una vivienda prefabricada, que tenía custodia policial, con el objetivo de demolerla por orden del Ministerio de Seguridad provincial. “La idea es atacar al narcotráfico desde todos los lugares que podamos”, aseguró Osvaldo Laffatigue, subsecretario de Seguridad Comunitaria.
El lugar donde se realizó la demolición había sido allanado el pasado sábado 23, cuando personal estaba buscando a los presuntos autores de un asesinato registrado a comienzos de febrero en un pasaje ubicado detrás del Centro Municipal de Distrito Sur.
Según voceros de la pesquisa, el lugar donde se realizó la demolición había sido allanado el domingo 24 de febrero, y tuvo como resultado la detención de un muchacho de 25 años, identificado como Ramón L. y el secuestro de una ametralladora de fabricación militar marca PAM (pistola ametralladora) calibre 9 milímetros con cargador calibre 40, con capacidad de efectuar 600 disparos por minuto y que trabaja en automático.
“Ramón es un pibe del barrio; trabajaba con los narcos, pero es un pinche, no tiene ni idea de cómo se maneja una ametralladora. Casualmente, el día que vino la Policía no estaban los jefes y no había droga” señaló una vecina de la zona, quien indicó que todos los habitantes del barrio saben dónde comercializan estupefacientes, pero que no lo denuncian por miedo.
Hace diez días, cuando se realizó el último operativo en el lugar, no se encontraron estupefacientes, pero en base a tareas de inteligencia la edificación fue derribada.
“Acá detuvimos a un muchacho que pertenece a la banda de los de Ameghino, un grupo de pibes que lleva largo tiempo tiroteándose con otra facción, que se identifica como la banda de Centeno. Nuestra idea es intentar es parar esto, para que no llegue a ser incontrolable”, afirmó un vocero de la comisaría 11ª, con jurisdicción en la zona.
En tanto, un vecino de la zona aseguró que “a los que vinieron a demoler el búnker, nosotros los vemos todas las semanas por la zona, desde hace mucho. Parece que no se daban cuenta de que vendían droga en este lugar”. Y agregó: “Justo cuando vinieron no había nadie vendiendo, pero acá desfilaba gente siempre”.