No jugó bien, pero ganó. Le costó horrores imponer su fútbol, pero se quedó con el primer chico de la serie. Tiro Federal venció a Guillermo Brown. Y aunque no tuvo ideas, sacó una mínima ventaja, pero ventaja al fin. Javier Fernández fue el autor del gol con el cual los Tigres, en Ludueña, se quedaron con el partido de ida de cuartos de final del Torneo Argentino A en busca del ascenso a la Primera B Nacional.
Se disputó la primera parte de la historia. Y el equipo de Osvaldo Bernasconi hizo lo que tenía que hacer: ganar, pero lo hizo sin convencer.
Por ello la victoria estuvo lejos de ser holgada y sin dudas de cara a la revancha el resultado no es tan cómodo. Claro que ahora serán los de Puerto Madryn los que tengan que salir a ganar, pero eso será el domingo…
Ayer, a Tiro le costó mucho doblegar a su rival. A un equipo que se paró con una línea de cinco defensores y puso solamente un hombre en ataque. Esa estrategia del técnico visitante fue un hueso muy duro de roer para Bernasconi y los suyos.
Es que en el primer tiempo el Tirolense equivocó los caminos: abusó de pelotazos frontales para Armani que fueron desactivados con facilidad por los tres centrales de Madryn y no pudo ganar las segundas jugadas. El partido indicaba que había que ganarlo por afuera. Y si bien, a veces lo intentó, nunca lo logró.
Más allá de eso, en una jugada no muy bien conjugada Fernández capitalizó la pelota fuera del área y con un zurdazo preciso marcó el primero haciendo estéril cualquier esfuerzo del arquero cañadense y ex Newell’s Diego Luque.
¿Y la visita? En defensa y mediocampo bien. En ataque sólo una que Mulieri mandó al córner sin problemas.
Para el complemento la historia indicaba que había que arriesgar para tratar de obtener una diferencia mayor. Sin embargo, eso no sucedió. Es que al banco de los Tigres no se le cayó una sola idea de cómo volver a doblegar a un rival que tenía en claro que la misión era que no le hagan más goles.
Los minutos se fueron consumiendo, Galvaliz no se hacía de la pelota y sin dudas su actuación hizo que se sintiera aún más la ausencia de su socio, Milton Zárate.
Ya en tiempo adicionado, Resler, de cabeza, pudo marcar pero la pelota se fue por arriba.
Tiro ganó como indican este tipo de definiciones. Pero no pudo sacar más ventaja, como también señalan esta clase de playoffs. El Tigre no tuvo ideas de cómo entrarle a un equipo que vino con una idea y la cumplió. El primer capítulo en Ludueña ya pasó, ahora la historia se trasladará muy lejos de casa.
Esguince sí, ¿ligamentos?
El delantero Yoni Angulo quedó descartado para el encuentro del domingo en Puerto Madryn. Pero más allá de su ausencia en la revancha preocupa el estado de la rodilla izquierda. Es que si bien el primer diagnóstico arrojó que solamente se trata de un esguince, no hay que descartar que tenga comprometidos los ligamentos. El futbolista mañana será evaluado a través de un estudio por imágenes y allí se conocerá cuál es el grado de la lesión. Angulo ingresó ayer en la segunda etapa y minutos antes de los cuarenta se lesionó solo cuando iba en busca de la pelota.
