Después de la publicación de la nota titulada: “Jockey Club, el último campeón del Torneo Rosarino disputado en 1999”, en la edición del día martes 16,. “El Hincha” charló con Fernando Darda del Castillo, el capitán del Verdiblanco que se coronó en la última edición del campeonato que organizó la Unión de Rugby de Rosario y que ahora, en tiempos de pandemia, vuelve a planificarse en el calendario 2021.
Del Castillo es sincero en el inicio de la charla. “No soy bueno con la memoria, ayúdame y vamos recordando”, reconoció el actual Gerente de Desarrollo de Sudamérica Rugby. A partir de ahí, con datos y preguntas, uno de los mejores jugadores que ha surgido de la inagotable cantera verdiblanca fue recordando ese gran año de su vida deportiva.
Decir 1999 en el rugby de Jockey Club es hablar de la temporada soñada por cualquier institución ovalada. Ese año el club de Fisherton se consagró en todas las categorías de los torneos organizados por la URR. La foto de todos los planteles juntos, ocupa un lugar excluyente en las paredes del Verdiblanco. “Todos campeones, una señal de que las cosas se hicieron bien, trabajo serio, con mucha pasión y amor al club”, dijo Del Castillo.
Ser campeón es de las cosas más lindas y si se le suma con la camiseta del club en el que naciste mucho más. Y ni hablar de conquistar el título en el último partido, ante tu clásico rival y de visitante. “Fue una final tremenda, palo a palo. En Jockey, tuvieron una muy buena tarde la pareja de medios: Seba Preumayr y Agustín Pérez Bustamante. Y dimos la vuelta olímpica en Duendes, un clásico rival. También recuerdo que Delfina, una de mis hijas, tenía un año cuando logramos el título”, expresó Darda, como es conocido en el ambiente del rugby.
Sobre sus compañeros de ese año, Del Castillo añadió: “Era un plantel bien dirigido, con dos nombres de peso en el club y con mucha pasión por el rugby, como Omar Tallo y Gustavo Minoldo. En cuanto a los jugadores, había un mix de experimentados, entre ellos Diego Silvetti, Iñaky Barrandeguy, Facu Lluch, Pedro Baraldi y Ezequiel Jurado, y un mix de jóvenes, que subieron en esos años y fueron camadas numerosas que engrosaron al plantel superior”.
Darda del Castillo se ganó el respeto de rivales y compañeros, dentro y fuera de la cancha. Jugar en Los Pumas lo llevó a la responsabilidad de ser el capitán del primer equipo de Jockey. “Tenía 28 años, llevaba 9 años en primera, fue un punto alto de mi carrera deportiva. Veníamos de ganar el Nacional de Clubes y había que mantener el nivel, el equipo funcionaba, nos conocíamos y nos gustaba a lo que jugábamos, estábamos convencidos”, cuenta Darda.
En ese momento de la charla, no hacen más falta los datos y preguntas, Fernando va recordando todo lo vivido en 1999. “A la distancia, creo que lo mejor que teníamos era locura por ganar, defender y atacar. Al estar dirigidos por Omar y Gustavo, el equipo construyó una mentalidad ganadora que derivó en hambre de gloria. Resalto la importancia del segundo equipo y tercero también, con quienes había una sana competencia, áspera, leal y competitiva que realmente hizo que todos fuéramos por el objetivo: jugar lo mejor posible, divirtiéndonos y ganando”.
A los ya mencionados históricos del Verdiblanco, sobre el grupo Darda señala: “Ya habíamos hecho el recambio de camadas, llegó la 76 con Rafael Sugasti, Sebastián Preumayr, Agustín Pérez Bustamante, Agustín Pozzo y Agustín Amelong, cinco jugadores de muy buen nivel. Otro que también levantó la mano fue Alejo Fradua. Ese año fue clave para el Jockey, se terminó de armar el grupo que al año siguiente ganara el Torneo del Interior”.
No es la primera vez que “El Hincha” charla con Darda Del Castillo, y se lo puede notar mucho más apasionado que en otras oportunidades, es que el tema central es recordar y hablar de su querido Jockey Club. “Logramos combinar lo social con lo deportivo, en su punto justo. Fue increíble, un equipo en todos lados, adentro y afuera de la cancha. Nos juntábamos los domingos en la quinta de Omar (Tallo), ahora entiendo muchas cosas que antes no… la pasamos muy bien y nos quedan los mejores recuerdos, hasta el día de hoy”, recuerda Darda.
Pero ese equipo Verdiblanco, no se quedó de brazos cruzados en 1999 y fue por más. “Ese año ganamos la Copa Federal y nos ganamos un viaje a Sudáfrica, que lo cambiamos para hacer una Gira por Australia en el 2000. Una gira de rugby es fundamental para cualquier proceso, lo que se vive en esos viajes de rugby es único, y si eso se combina con buenos jugadores y entrenadores, te lleva a lograr los objetivos planificados. De todas formas, haber ganado todas las divisiones es parte de todo el club y no de una personas, sino de un equipo de voluntarios que a través de vínculo con el club”, comenta a la distancia.
A todos nos gusta ver en acción al Torneo Regional del Litoral, pero para empezar la vuelta a la actividad en plena Pandemia de Covid-19 y tras más de un año sin rugby en la ciudad, jugar un torneo rosarino no es mala idea. Sobre la vuelta al juego, opinó Del Castillo: “Ante el marco que impone la pandemia, para mi es una decisión acertada volver jugar el Torneo de Rosario. Cuanto menos viaje haya y se inicie el campeonato, mejor. También es importante cuidar los protocolos médicos, hay que educar a los chicos, no hay que bajar la guardia. Seguramente los equipos aprovecharán la oportunidad de disfrutar de lo más importante: el juego”.