El operativo de seguridad para el cotejo entre Central y Boca implicará a 1.100 policías de la provincia de Córdoba. La gente de Central, alrededor de 25.000 personas, se trasladará por la Autopista Rosario-Córdoba. En tanto que los simpatizantes xeneizes, que irán desde Buenos Aires, algo más de seis mil, serán derivados por la ruta 8. El resto de los simpatizantes del equipo de Arrubarrena son de Córdoba y zonas aledañas y no corren riesgo de cruzarse con los rosarinos.
“La recomendación es que la gente llegue 4 o 5 horas antes del partido, así ingresan sin problemas al estadio”, expresó Rody Guerreiro, presidente del consejo de seguridad deportiva de la provincia de Córdoba. Y añadió que “los controles en ruta serán muy estrictos”.
El Cosedepro, ente encargado de la seguridad en los eventos realizados en Córdoba, emitió un comunicado enumerando la ruta a seguir y los cuidados que deberán tener los hinchas de Central en su camino al estadio Mario Kempes. “Los simpatizantes de Rosario Central ingresarán por la zona norte de la ciudad a través de Circunvalación Norte hasta Mujer Urbana llegando al estadio por Av. Laplace. Los simpatizantes ocuparán la platea Osvaldo Ardiles y la popular norte Daniel Willingon, que es ocupada por los hinchas de Talleres cuando juegan de local en los partidos oficiales”, reza el escrito.
El estadio abrirá sus puertas a las 17.30, habilitando para el ingreso los portones número dos y número tres para simpatizantes canallas.
En organismo recomienda, para evitar mayores demoras, arribar temprano al estadio, ingresando con mucha antelación al mismo, estando previsto un espectáculo musical para entretener a los presentes. Y se permitirá el ingreso a la hinchada de 10 banderas tirantes, una bandera grande y elementos de percusión. Y los ómnibus se estacionarán en la playa norte del estadio como así las combis y autos particulares.
El escrito dice además: “Respecto al control en ruta, se realizará en el peaje sobre autopista en proximidades a Córdoba requisando que no transporten alcohol, armas u otro tipo de sustancia no permitida. En el caso de alcohol encontrado en el vehículo se procederá al decomiso del mismo y de acuerdo a la toxicología arrojada podría detener al conductor”.
Lucas Brest se pasó de vivo y lo pusieron a disponibilidad
La viveza criolla en eventos importantes, como la final de la Copa Argentina entre Central y Boca, es claramente una de las características principales de algunos argentinos. El caso del policía Lucas Brest es un claro ejemplo de alguien que pensó ser un vivo y terminó atrapado y sin salida.
Cientos de canallas explotaron en las redes sociales cuando observaron una fotografía que rápidamente se viralizó, en la que un efectivo policial mostraba sonriente y orgulloso decenas de entradas de Central correspondientes a la final de la Copa Argentina que el Canalla jugará hoy en Córdoba ante Boca.
Debido a esa acción, el jefe de la Unidad Regional II, Marcelo Villanúa, adelantó que el uniformado será pasado a disponibilidad por la actitud que tuvo mientras miles de hinchas canallas se agolpaban en la fila del Gigante de Arroyito y sufrían el maltrato de la propia policía. Incluso muchos hicieron más de doce horas de cola y se fueron sin su ticket para ver al Canalla en el estadio Mario Kempes.
Lucas Brest se quedó con 165 entradas populares que estaban destinadas a los hinchas de Central y por estas horas se investiga cómo consiguió esos tickets, ya que habría contado con la complicidad de una o más personas que tuvieron a cargo la venta.
Luego de apropiarse de esa importante cantidad de entradas generales, que según el valor oficial (200 pesos) representan 33 mil pesos, Brest se tomó una foto junto con su trofeo. Esa imagen es la que lo delató y lo dejará sin trabajo en la fuerza policial.
“El señor (Lucas) Brest fue puesto a disposición de la Fiscalía; su comportamiento no es propio de un policía”, aseguró el comisario Villanúa en el programa “2 de punta”, de la FM 107.5.
Lucas es sobrino del comisario Hernán Brest, quien fuera muchas veces cuestionado por su labor al frente de los operativos policiales en los estadios de la ciudad, especialmente en el Coloso Marcelo Bielsa.
De hecho, el propio presidente de Newell’s, Guillermo Lorente, responsabilizó a Hernán Brest por los graves incidentes que se registraron en el Coloso en octubre de 2011, luego de un partido que la Lepra empató con Olimpo. Esa noche la policía ocasionó serios destrozos en la confitería del club y el presidente rojinegro pidió que el comisario no vuelva a estar al frente de un operativo en el Parque.
La eventa, al día
Hinchas de Central revenden entradas para la final de esta noche a cifras que oscilan entre los 1.000 y los 1.600 pesos, según denunciaron socios canallas a Télam. “El sábado, cuando ocurrieron los incidentes, alrededor del Gigante había tipos que revendían entradas a mil pesos. Fue una verdadera vergüenza”, denunció ayer Juan, un socio de 53 años de la Granadero Baigorria, en diálogo con Télam.
Patricio Graff: “Me pone feliz este presente”
Patricio Graff fue parte del plantel de Central que se coronó campeón en la Copa Conmebol 1995, último título del Canalla. En la actualidad el Pato es ayudante de campo de Pablo Vitamina Sánchez en el O’Higgins de Chile y dialogó con El Hincha sobre el gran presente canalla.
“Creo que todos, más allá de la distancia, lo estamos viviendo con mucha ansiedad y distintas sensaciones que esperemos poder expresarlas después del partido frente a Boca. Sin lugar a dudas me pone feliz el momento de Central. Por el plantel, que está plagado de chicos del club y grandes profesionales, que si bien no nacieron en el club se brindaron al ciento por ciento. Feliz por el cuerpo técnico, tuve la suerte de jugar con el Chacho y enfrentar al Chino (Garcé) y me alegra por ellos. Y mucho más feliz por los hinchas”, comentó el Pato a la distancia.
Graff recordó aquella final con Atlético Mineiro y como fueron los días anteriores y posteriores a la consagración. “Tengo los mejores recuerdos, sin lugar a dudas. Era joven y sabía muy bien que le íbamos a ganar por cómo se había dado el partido. No sabíamos si íbamos a poder revertir el abultado resultado de la ida, pero teníamos que dejar todo por el hincha y así fue como lo revertimos y salimos campeones”, aseguró el rosarino.
En cuanto al partido que debe hacer Central hoy ante Boca dijo: “Hay que mantener la presión alta que ejerce normalmente Central y apabullar en los primero 15 minutos, que son fundamentales para sacarle la pelota al rival y hacerlos dudar. Igualmente creo que Coudet ha demostrado que sabe lo que tiene que hacer”.
Graff opinó que este equipo de Central merece coronar la gran campaña con un título. “Debería tener el premio más grande, por lo que generó, por lo que mostró, porque la gente también necesita esta alegría”, subrayó.
Por último, contó adónde y con quién va a ver la final ante Boca. “Lo voy a ver en las oficinas del Monasterio Celeste, que es la ciudad deportiva de O’Higgins, junto con Pablo (Sánchez), con la ansiedad normal de estos partidos que son a darlo todo y un poco más. Decir un resultado es difícil, quisiera que gane Rosario Central 2-0, y que Ruben y Pinola conviertan para cerrar una excelente campaña”, concluyó el Pato Graff.
