“Nosotros marcamos fuertemente la agenda, incluso hasta respondiendo algunas iniciativas del Ejecutivo como el endeudamiento. El peronismo en estos años marcó mucho la agenda del Concejo y de Rosario”, expresó el primer candidato a concejal del frente Juntos Eduardo Toniolli.
En diálogo con El Ciudadano, el dirigente del Movimiento Evita que busca revalidar su banca en el Concejo Municipal insiste en remarcar los tres ejes de campaña que planteó en 2015 porque considera que no se han hecho “avances significativos”. Ellos son: transporte, producción y empleo, y seguridad pública.
“Tenemos la expectativa de seguir reforzando lo que venimos trabajando en el Concejo. En mi caso, desde diciembre de 2015 que me tocó ingresar, tomé tres temas prioritarios y que son el gran déficit de la gestión municipal: transporte, producción y trabajo, seguridad pública.
—¿Por qué son los mismos ejes que en 2015?
—Son los mismos porque creemos que no se ha avanzado. En transporte hace 4 años decidimos poner en pie el Observatorio Social de Transporte porque el Concejo había tomado la decisión errónea de enajenar una potestad que le es propia y dársela a la intendenta. Dejar de discutir el precio del boleto significaba que se dejara de discutir sobre la calidad del servicio. Por eso nos la ingeniamos para poner meter en el recinto informes sobre la frecuencia o la falta de servicio nocturno. El segundo tema, la cuestión de la producción y el trabajo, lo venimos denunciando: tenemos un marco nacional terrible, que asfixia a las industrias y a las pyme pero al Estado local parece que no le roza porque cree que solamente la macroeconomía resuelve estas situaciones. Y si bien la macroeconomía es un marco general que te constriñe, también podés hacer muchísimas cosas. Desde el Concejo, y no del Ejecutivo, surgió el Compre Local, la ordenanza que crea el programa de acompañamiento a empresas locales para que se conviertan en proveedores del Estado municipal y no se tenga que comprar contendores en Chile, bicicletas en Córdoba o colectivos en Buenos Aires. En seguridad, soy autor de una de las tantas ordenanzas incumplidas que crea el programa para la prevención social del delito, una de las áreas donde puede intervenir el municipio. Se trata de buscar alternativas para miles de jóvenes en situación de vulnerabilidad que empiezan a tener sus primeros conflictos con la ley penal por cuestiones menores y que entre el Irar y volver a su casa no tienen nada en el medio que signifique un salvavidas. Esto más allá de un montón de otras cosas que son poda, escamonda, transporte público a la noche, que coadyuvarían en la materia.
—Lograron desde la actividad legislativa poder instalar distintas temáticas…
—Creo que sí, nosotros marcamos fuertemente la agenda, incluso hasta respondiendo algunas iniciativas del Ejecutivo como el endeudamiento. El peronismo en estos años marcó mucho la agenda del Concejo y de Rosario. La marcamos porque trabajamos con sectores organizados. En el Compre Local lo hicimos con los trabajadores y los gremios en la calle; el Observatorio del Transporte lo hacemos con el usuario, vecinales y comerciantes que creen que mejorar el transporte público no le sirven sólo al usuario sino también a la actividad comercial. Es decir, no es producto de ninguna genialidad individual sino de estar al lado de los sectores de la producción, del trabajo, los vecinos, acompañando las iniciativas y ahí sí poniéndole nuestra impronta personal.
—¿Qué ejemplo pondría de esa “agenda propositiva” a la que se refiere?
—Hoy por ejemplo estaríamos con casi la mitad del presupuesto hipotecado producto del proyecto de colocación de bonos de deuda en el mercado de capitales que proponía el Ejecutivo, a tasas usurarias en dólares a cambio de una promesa muy lábil de obras, un listadito sin ninguna garantía de concreción. Y fue el peronismo el que lo bloqueó porque el Frente Progresista ya tenía la adhesión de Ciudad Futura. Sí nos parecía estratégica la obra de El Mangrullo y la recuperación de las líneas de troles. Por eso planteamos la posibilidad de que el Ejecutivo fuera a un banco de fomento, pidiera un crédito más accesible, con garantía de cumplimiento de obra. Y el Ejecutivo, frente al fracaso de su propuesta, que era demencial, decidió tomar en el tema de El Mangrullo y el bajo Saladillo, esa opción que llevamos adelante. Es decir, nos opusimos vehementemente a algo que nos parecía negativo pero que planteamos una alternativa y el municipio decidió tomar parte de esa alternativa.
—¿Por qué los rosarinos deberían votar a la lista de concejales del frente Juntos?
—Primero para fortalecer el trabajo que venimos haciendo, los rosarinos y rosarinas identifican al peronismo como una fuerza que defiende derechos. Después porque creemos y queremos formar parte de un proyecto que no es exclusivamente de un dirigente, es un proyecto colectivo que tiene sus referencias aquí con Omar Perotti como candidato a gobernador y Roberto Sukerman como candidato a intendente y empieza a despuntar nacionalmente como la única alternativa posible para desplazar por los votos a Mauricio Macri. Entonces, en ese proceso de renacimiento pero en un escenario difícil en lo económico en términos de lo que se viene con la deuda con el FMI, necesitamos un gobierno con vocación industrialista, por el trabajo y la producción, para reconstruir la Argentina.
“Hay una infinidad de ordenanzas que no se cumplen”
Eduardo Toniolli trazó un paralelismo tras su paso como diputado provincial y, a diferencia de la Legislatura, cree que una de las “limitaciones más grande” del órgano legislativo local es que “hay una infinidad de ordenanzas aprobadas que después no se cumplen”.
“No lo digo como una chicana, lo digo de observar la gran actividad legislativa que ha tenido en el último tiempo el Concejo y la poca respuesta del Ejecutivo a la hora de cumplir”, evaluó.
“Si hay ordenanzas que salen con una amplia aprobación pero la intendenta no tiene interés en aplicarla o considera que hay alguna objeción con su aplicación, debería vetarla, tiene la potestad para hacerlo y decir por qué”, le solicitó a la mandataria local Mónica Fein.
“Acá lo que falta es liderazgo de un intendente que se ponga al hombro un montón de problemas de la segunda o tercer ciudad del país. La resolución de un problema como la seguridad pública aun cuando una parte de esa resolución no sea de su estricta competencia”, finalizó.
“Acá no se elige con el dedo”
El frente Juntos tuvo en las Paso una variada oferta de listas en la categoría de concejales, que conformó una nómina con una “muy buena síntesis”. “Somos una fuerza política viva, donde no funciona el dedo sino que cada sector tiene legítimas aspiraciones para presentarse no siendo la lista oficial de tal o cual candidato, que es lo que nos pasó a nosotros”, expresó Eduardo Toniolli.
“La síntesis que se logró tanto en diputados como en concejales fue muy buena porque es muy variada, con los más diversos sectores incorporados a la lista, con mucha potencia”, detalló.
“En el caso de los tres primeros lugares de la lista, somos concejales y concejalas que estamos en gestión, cada uno con su perfil y desarrollo en distintas materias. En el caso de Marina Magnani referenciada con su militancia ligada a lo territorial, a la defensa de los derechos de las mujeres. En el caso de Fernanda Gigliani viene desarrollando un trabajo muy interesante en el tema planeamiento, con un gran expertise técnico y una mirada del desarrollo urbano”, expresó Toniolli.
